domingo, 13 de junio de 2010

DEGOLLADOR DE PUKARA

El 'degollador' de Pucará
Por: Antonio Muñoz

El Centro Arqueológico Ceremonial Kalasaya de Pucará, distrito de la provincia de Lampa, a 3.800 metros de altura sobre el nivel del mar, en Puno, es escenario de la peculiar puesta en escena evocadora de un ancestral rito. Entre el 16 y 18 de junio se realiza la extraordinaria escenificación de El Gran Degollador, con la participación de un numeroso grupo de jóvenes artistas —alrededor de doscientos—, integrantes del Grupo Cultural “Ñaupa Riqchari”, que quiere decir “Que despierte nuestro pasado”. La mayoría son estudiantes de secundaria comprometidos con conservar la historia de su localidad.

Orgullosos quechuas
La puesta en escena dura alrededor de cuatro horas y congrega a pobladores de esta zona quechuahablante del departamento de Puno. Con orgullo, recrean los conocimientos de su historia ancestral para reafirmar y difundir la identidad de la gran cultura Pucará, que se desarrolló entre los años 400 y 300 después de Cristo.

Sacrificio y danzas
La ceremonia recuerda la importancia de los antiguos sacerdotes, depositarios de conocimientos astronómicos, tecnológicos, hidráulicos, agrícolas y arquitectónicos, de los que dependió el florecimiento de Pucará.

En el imponente acto se simula un sacrificio humano y luego se realiza un hermoso festival de danzas nativas de la zona, donde sobresalen los “Ayarachis”, “Llamaqati”, “Saraquena”, “Llameritos”, “Turcos”, “Wasuchacuy”, “Tarpuy” y la hermosa “Puli Puli” que simboliza a las parihuanas —flamencos— que llegan a las lagunas andinas por miles. Jolgorio cargado de un fuerte sentido de religiosidad mestiza. Y si hay tiempo vale quedarse para la fiesta de la Virgen del Carmen, su patrona, que cada 16 de julio congrega a miles de peregrinos

Imprescindible visita
El Gran Degollador es una obra teatral comunal que vale la pena ver en esta zona y de paso visitar sitios imprescindibles como el Centro Arqueológico Ceremonial Kalasaya, la iglesia Colonial Santa Isabel, el histórico Peñón de Pucará y el Museo Arqueológico, y de paso comprar un torito de Pucará.

El torito del otro lado
El “Torito de Pucará” es una de las más importantes y hermosas expresiones del arte popular puneño. Aunque lleve el nombre en realidad no es originario de Pucará sino de la cercana comunidad de Cheqa Pupuja, en el distrito José Domingo Choquehuanca, provincia de Azángaro.

Toma el nombre de Pucará pues es en esa estación ferroviaria, distante apenas 15 kilómetros Cheqa Pupuja, donde tradicionalmente se lo comercializa.

Enrique Cuentas Ormachea, escritor puneño sostiene: “el toro de Pucará es, a la vez que expresión de arte barroco, manifestación del espíritu mágico religioso del campesino qolla.

Tiene peculiar sabor dado por sus rosetones, su estilizada enjalma, los alamares que le cuelgan del pecho, simbolizando la marca de los años y que acusa tanto el carácter decorativo como el “señalacuy” o “marca del ganado”, que para el campesino tiene contenido ritual”.

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