)
.Por Humberto Campodónico
Un reciente informe periodístico dice que “varios cambios ocurrieron en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), que permitieron que la controvertida propuesta de Santa Sofía Puertos (de construir un puerto en la bahía de Ancón) fuera admitida y ampliada un año después de haber sido rechazada –en el 2007–por la Dirección General de Concesiones de ese ministerio” (El Comercio, 21/12/2010).
Continúa El Comercio: “Uno de ellos fue la designación de Marco Hernández Dongo en la Dirección General de Transporte Acuático (DGTA), el 1 de octubre del 2008, tras la salida de Juan Carlos Paz Cárdenas. Ese mismo día también fue aceptada la renuncia de Juan Suito Larrea a la Dirección General de Concesiones del MTC y en su reemplazo se nombró a Miguel Ángel Sánchez del Solar” (ídem).
La cuestión es que Marco Hernández se había desempeñado antes como gerente de Operaciones de Santa Sofía y de Tramarsa, ambas de propiedad del grupo Romero. Una vez que Hernández salió del cargo del MTC, en el 2009, regresó a trabajar para el Grupo Romero en calidad de asesor.
Para el Grupo Romero el proyecto de Ancón (situado a escasos 25 km del Muelle Norte, de Enapu, y del Muelle Sur, que acaba de ser construido por Dubai Ports con una inversión de US$ 565 millones) es importante para sus operaciones de importe a granel de una serie de insumos para sus empresas.
También planteó Santa Sofía Puertos que se le permita construir un muelle de contenedores (como los del Callao), lo que fue rechazado en el 2007 por la Dirección General de Concesiones por considerarlo “competencia desleal” con el Callao. Pero en el 2008, eso cambió y ahora Santa Sofía está realizando un Estudio de Impacto Ambiental para ambos fines (granel y contenedores).
No sería la primera vez que el Grupo Romero utiliza la táctica de introducir “topos” en los ministerios para que utilicen sus cargos públicos a favor de intereses privados. Eso sucedió, como lo admite Dionisio Romero, cuando “le prestó” al primer ministro Efraín Goldenberg a su funcionario David Saettone. Eso sí, Romero le dijo a Saettone que no se demorara mucho en el Ministerio porque podría perder su cargo (Tengo un temita, que es de mi bolsillo, www.cristaldemira.com, 11/4/09).
Recordemos, también, que Dionisio Romero le pidió a Vladimiro Montesinos–en la salita del SIN– que le baje el arancel al trigo de 25 a 12.5% para ayudar a Fujimori a ganar las elecciones del 2000 aunque, claro, no le garantizaba que el precio del pan iba a bajar pues eso era cuestión del “libre mercado” (ídem).
El Sr. Hernández ha declarado luego que cuando estuvo en la DGTA “no se vio el proyecto de Ancón” (El Comercio, 26/12/10). Pero no es eso lo que dice la Resolución Suprema 149-2008-MTC del 27/11/2008, pues en sus considerandos cita al Informe # 106-2008 del 27/10/2008 de la DGTA (a cargo de Hernández) donde se dice que Santa Sofía “ha cumplido con todos los requisitos exigidos por las normas del sector para la expedición de una autorización temporal de uso de área acuática”.
Agrega la RS-149-2008 que la DGTA está a favor de que se realicen los estudios para “determinar la conveniencia de un terminal de contenedores dentro del terminal de Ancón, siendo que la eventual concurrencia de DP World, ENAPU y Santa Sofía generaría beneficios para el comercio exterior y para el país en su conjunto” (ídem). Lo exacto opuesto de lo que se decía antes.
¿Cuántos “topos” no conocemos y siguen siendo moneda corriente en este “Estado privatizado” para favorecer los intereses de unos pocos –será también el caso de la venta de ENAPU-Callao, que está llena de nubarrones–? ¿No se decía que los grandes grupos económicos y el empresariado en general habían dejado de recurrir a las viejas prácticas mercantilistas porque se habían modernizado y ahora “se abren a la competencia en el libre mercado”? Ya pues, es hora de detener este proyecto que, además, atenta contra la preservación del medio ambiente. De una vez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario