.Por Humberto Campodónico
Un reciente estudio (abril del 2011) del Energy Information Administration del Departamento de Energía de EEUU contiene información que producirá un cambio fundamental en el mercado mundial de gas natural (GN). Y, por lo que vamos a ver, con la actual política peruana no vamos a salir bien librados.
El estudio (1) trata del gas esquisto (en inglés, “shale gas”), hidrocarburo que ahora podrá ser extraído y comercializado ampliamente debido a nuevas técnicas de ingeniería geológica. Lo importante es que los recursos técnicamente recuperables (RTR) ascienden a 6,622 billones de pies cúbicos, cantidad que duplica a las reservas probadas de GN (2).
Hay varios países de la región que poseen grandes cantidades de este gas. Así, Colombia, que solo posee 4 bpc de reservas probadas de GN tiene 19 bpc de RTR de gas esquisto, es decir, 5 veces más. A manera de comparación, el Perú, en los Lotes 88 y 56 tiene 8 bpc de reservas probadas de GN y probablemente 4 bpc más en los lotes aledaños, el 57 de Repsol y el 58 de Petrobrás.
De su lado, Argentina tendría 774 bpc de gas esquisto, lo que incrementa sus actuales reservas de GN (13.4bpc) en nada menos que 5,676%. Incluso países como Uruguay y Paraguay que –hoy– no tienen reservas probadas de GN pasarían a tener 21 y 62 bpc de RTR de gas esquisto. Conclusión: si todos van a tener gas, ¿cuál es el sentido de exportar nuestro pasaporte a la independencia energética en el largo plazo?
EEUU es uno de los países que más nos interesan, porque la venta del gas del Lote 56 y del Lote 88 va a México, cuyos precios son los mismos. Pues bien, EEUU tiene un aumento del 213% y el propio México un aumento impresionante de 5,575%.
Estas cifras no son una invención. Son realidad constatada por el EIA que dice que las regiones prioritarias para su Estudio fueron seleccionadas por una combinación de factores que incluyeron “la disponibilidad potencial de información, la dependencia de las importaciones de gas, los yacimientos observados de gas esquisto y las observaciones de las actividades implementadas por los gobiernos y las empresas para el desarrollo del gas esquisto”. Ignoramos por qué Perú no figura en la lista.
Si esto es así –y lo es– los precios del gas natural tenderán a la baja, por la mayor oferta. Eso ya sucede en EEUU, donde la producción del gas esquisto en el 2009 fue el 23% de la producción total. Para nosotros la noticia es pésima, pues Repsol tiene comprometida la venta de nuestro gas a México.
Esto reconfirma lo que aquí se ha dicho hace tiempo: que exportamos a nuestro gas a precios inferiores a los de nuestro mercado interno. En efecto, el precio “netback” a México es de US$ 0.60 /MMBTU mientras que aquí el precio es US$ 2.50/MMBTU.
No solo eso: la exportación del gas fraguada bajo Toledo, y ratificada por este gobierno, impide que las reservas del Lote 88 abastezcan las necesidades del mercado interno, como el gasoducto andino, las demandas industriales y las conexiones domiciliarias. Por eso se debe cumplir de inmediato con lo que dispone el DS-053-2010-EM para que el 100% de las reservas del Lote 88 vuelvan al mercado interno. ¿Hasta cuándo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario