La caída de Nixon

La caída de Nixon
El Caso Watergate. El 8 de agosto de 1974, el presidente de Estados Unidos Richard Nixon renunció al cargo, tras el escándalo de Watergate. Las primeras reacciones de la noticia fueron dadas a conocer por El Comercio*


WASHINGTON, AGOSTO 8 -URGENTE- [AFP]. Richard Nixon anunció esta noche su dimisión como presidente de Estados Unidos en un discurso televisado a todo el país desde la Casa Blanca.

Nixon es el primer presidente norteamericano que renuncia a su cargo.

Su reemplazante será Gerald Ford, vicepresidente designado por el Senado en noviembre de 1973, a propuesta del mismo Nixon.

El instante oficial del cambio de funciones tendrá lugar el viernes 9 de agosto, a las 12h00 locales (16h00 GMT).

Se despide de senadores y representantes
Una hora antes de anunciar su renuncia por televisión, el presidente Nixon reunió en la sala de Gabinete de la Casa Blanca a un grupo de 47 senadores y representantes que lo habían apoyado en su batalla judicial con el Congreso.

Nixon agradeció su fidelidad y los despidió en vísperas de abandonar la Casa Blanca.

Poco antes, Nixon había informado oficialmente a los líderes demócratas y republicanos del Congreso de su decisión de renunciar a la presidencia.

WASHINGTON, AGOSTO 8 [UPI]. Nixon dijo esta noche que renuncia porque no tiene suficiente respaldo en el Congreso para mantenerse en la primera magistratura para combatir las acusaciones del juicio político por el escándalo de Watergate. Advirtiendo que no acostumbra a abandonar las posiciones, reveló que “hubiera preferido llevar esto hasta el fin a pesar de la agonía personal para mí y mi familia me instó unánimemente a que así lo hiciera”.

Agregó que entregaría las riendas del poder al vicepresidente Gerald R. Ford mañana viernes.

“Siempre he tratado de hacer lo que es mejor para el país”. Durante los días de Watergate “creí que mi deber era perseverar”.

“Se ha puesto en evidencia que no tengo suficiente respaldo en el Congreso para continuar ese esfuerzo”.

“Hubiera querido seguir hasta el final este asunto sin importar la agonía personal que representara, pero el interés de la nación debe anteponerse a los intereses personales”.

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“Este país necesita un presidente que le dedique todo su tiempo y un Congreso en las mismas condiciones”.

“La dirección del país estará en buenas manos”.

“Continuar luchando para vindicar mi nombre”, dijo Nixon, tomaría demasiado tiempo del Congreso y del Gobierno. “Por tanto, renuncio a la presidencia a partir del mediodía de mañana [viernes]. El vicepresidente Ford prestará juramento como presidente a esa hora en esta oficina”. Al entregar el poder a Ford, Nixon afirmó: “Sé, como dije cuando lo propuse (a Ford), que la dirección del país estará en buenas manos”.

Nixon, como ha hecho a menudo, mencionó su parte en la finalización de la Guerra de Vietnam y “en traer paz al mundo”. “Debemos completar la estructura de la paz de modo que pueda decirse que nuestra generación de norteamericanos no solo terminó una guerra, sino que contribuyó a evitar otras”, afirmó Nixon. Calificó sus cinco años y medio en el gobierno como “tiempos memorables, época de logros”.

Éxitos y fracasos
Afirmó que siempre “luchó por lo que creía” y que trató de cumplir con sus obligaciones.

“Algunas veces he tenido éxito. Otras he fracasado”.

Como consecuencia, siguió Nixon, creo que los norteamericanos tienen ahora una oportunidad mejor de “vivir en paz en vez de morir en la guerra”.

Kissinger sigue como secretario de Estado
WASHINGTON, 8 [ANSA]. Gerald Ford confirmó esta noche que aprovechará la competencia y la capacidad de Henry Kissinger en la conducción de la política exterior.

Ford elogió a Nixon
Poco después del discurso de Nixon, apareció en las pantallas de televisión el nuevo presidente Gerald Ford. Hizo un vibrante homenaje a Nixon, definiéndolo como “uno de los más grandes hombres de Estado que había trabajado por la paz y el bien de los hombres”.

[*] El Comercio, 9 de agosto de 1974.