FAENON EN ENAPU

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El gobierno ha publicado el 28 de octubre la III Versión del Proyecto de Contrato para la llamada concesión del Terminal Norte del Callao, que no es otra cosa que la privatización monopólica del Callao y la liquidación de Enapu. Escribo el miércoles 03 de áoviembre en la mañana, y en la tarde la Comisión de Transportes del Congreso tiene sesión extraordinaria para escuchar al respecto al Ministro de Transportes y a mi persona, que asisto en calidad de representante de los trabajadores portuarios a la Autoridad Portuaria Nacional y con el respaldo del Frente de Defensa de la Región Callao.



El Contrato III no ha corregido lo que he denunciado ante la Contraloría, sino que ha acentuado las ilegalidades de una concesión antinacional. Es una versión ampliada del Paitazo. El Modelo entrega el Puerto Publico a monopolios parasitarios, los que sin invertir dinero fresco hacen caja con tarifazos que pagan los usuarios nacionales, y expropian la soberanía portuaria al hipotecar el activo estratégico.

Han hecho más evidentes las condiciones ilegales del faenón. Primero, con la figura invertida de Asociación en Participación, disuelven por DS y acto administrativa a Enapu, cuando la Ley Portuaria y el DL 098 señalan que solo puede ser disuelta por Ley. En el Contrato II agregan el listado de los activos de Enapu (2 Grúas Pórticos, 2 Grúas Autopropulsadas, 11 Grúas Móviles, 21 movilizadores de contenedores, 25 plataformas semiremolque, 5 camiones y 15 motores), los que declaran bienes de dominio público, para darlos en “alquiler”. Es una venta subvaluada de la empresa, no solo desvalorizando activos, sino regalándola al no considerar los valores más importantes: cartera de clientes, experiencia, localización, intangibles empresariales.

En la otra ilegalidad, hacen el ridículo, evidenciando que no parten de un planeamiento sino de bases comerciales que entregan al cliente con improvisado diseño portuario. En el Contrato III, cambian las inversiones en las Etapas 3,4 y 5, pues si en el II indicaban que seria para “terminales” (es decir, “muelles”), ahora en el III lo reemplazan por “amarraderos”, los que pueden ser varios en cada muelle. Este cambio demuestra total improvisación, o una brutal rebaja de la inversión real.

En la ilegalidad del modelo desnacionalizador monopólico, el Contrato III hace evidente la entraña del Faenón. Anuncia que por la concesión se pagara 3 % de los ingresos netos mensuales. El concesionario monopólico hace caja con tarifazos sin invertir nada, hipoteca la soberanía, le dan subvaluados los activos ¡ y todavía paga una retribución como si alquilase un terreno baldío! ¡Regalan Enapu-Callao, el megapuerto en marcha del país a cambio de US$ 200 millones, cuando Dubai Ports debe invertir por hacer un muelle nuevo 600 millones y pago además de un adicional de US$ 144 millones!. Este segundo megafaenón, luego del de la exportación del gas de Camisea, lo imponen impidiendo que Enapu reinvierta los US$ 48 millones disponibles y obtenga socios financieros. Derrotemos este faenón, ¡es la hora de defender a Enapu y el megapuerto peruano del Callao!