MANUEL DANMMERT
Callao: en crisis la abdicación de la soberanía marítima portuaria
Entró en crisis abierta la ilegal subasta y liquidación de Enapu Callao por el gobierno. El Comité de Proinversión, integrado por 5 ministros, el 23 de noviembre había aprobado la “versión definitiva” del Contrato, para entregar la concesión el 17 de enero. Es de tal envergadura el escándalo, que el 14 de diciembre nada menos que su director ejecutivo dijo que “van a elaborar una nueva versión definitiva”, casi para el 28 de diciembre, día de los inocentes.
El país ha empezado a movilizarse por la soberanía portuaria. La denuncia que hice el 04 y el 26 de noviembre, a la contraloría y al Congreso, ha tenido efectos. Los portuarios de Fentenapu y Sitenapu han empezado a movilizarse y anuncian paros y otras medidas de lucha. Adex (Asociación de los Empresarios Exportadores) se pronunció contra la burda Adenda al ilegal Contrato de Paita, que comentamos la semana pasada. Se hicieron públicas las críticas al “factor de competencia” en el Callao, centrado en quien ofrezca menores precios por almacenajes extraportuarios, que no es otra cosa que direccionar la concesión hacia el grupo naviero portuario Chileno y sus terminales extraportuarios, que son los responsables de los sobrecostos que pagamos los usuarios por más de US$ 400 millones al año. La Comisión de Transportes del Congreso ha empezado a fiscalizar estas irregularidades. Para completar la crisis, la empresa China Hutchinson hace correr la voz que se retira del concurso. Un amplio abanico multipartidario exige que el Congreso apruebe este jueves 16 la Ley de Fortalecimiento de Enapu cuyo dictamen esta hace tres años en la orden del día. El país reclama se anule esta ilegal subasta de la soberanía.
Estos días son cruciales en esta batalla. El tema central, no hay que olvidarlo, es el de la soberanía marítimo portuaria. El gobierno pretende liquidar Enapu para que la actividad marítima portuaria del Perú este subordinada al monopolio naviero portuario Chileno de Vonappen, Urenda y Claro. Ya le han entregado los puertos del Sur (Matarani, subordinado a Arica) y Paita (entregado a Neptunia y con la Adenda suscrita se hipoteca la Soberanía al SocotiaBank, cuya sede en Chile es controlada en 50 % por el Grupo Chileno Naviero de Claro). El Perú ha perdido estos dos puertos, y se ha castrado su proyección interoceánica. Además, el gobierno no ha reglamentado la aprobada ley de la Marina Mercante Nacional, saboteando que el país desarrolle esta industria. En cambio, ha afianzado el control de Vonappen en el transporte marítimo de combustibles: Petróleo de Talara a Matarani, y GLP de Pisco a Lima.
El corazón de esta abdicación de Soberanía esta en el Callao. Pretenden al mismo tiempo liquidar Enapu y controlar el megapuerto del Pacífico sur. Entre el Duo-polio ( Hutchinson y DPW) o el Monopolio(DPW), ambas antinacionales, el gobierno de García ha optado, con las razones de Don Bieto, por este último. Por eso, la barbaridad del “factor de competencia” del cuestionado contrato, está buscando sellar un monopolio que reparte negocios. La operación del puerto para DPW, pues la empresa Ports of America, tiene lazos financieros con AIG Higstar Capital III, que no es sino un fondo de inversión para “minorista de control”, lazos forjados cuando el 2006 fue DPW expulsada de los puertos de USA pero construyó el 2007 estos singulares lazos financieros y adquirio Ports of America. . Los otros negocios, del control naviero y de almacenes extraportuarios, quedarían a cargo del grupo naviero Chileno, que sellaría así su control marítimo portuario del Perú.
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