viernes, 29 de julio de 2011

CACERES VERSUS IGLESIAS

La iniciativa del presidente Alan García, de trasladar este lunes 4 de julio los restos del general Miguel Iglesias a la Cripta de los Héroes, localizada en el cementerio Presbítero Maestro, ha generado un movimiento de rechazo por parte de las organizaciones patrióticas dedicadas a honrar la memoria, encabezadas por la Orden de la Legión Mariscal Cáceres, que preside el general de división EP Pablo Correa Falen. El dirigente, en esta entrevista exclusiva, reseña que Iglesias nunca tuvo un comportamiento heroico y, por el contrario, fue un traidor que se coludió con los invasores chilenos para sellar una paz con entrega de territorios y derrotar la resistencia nacional liderada por el general Andrés Avelino Cáceres. A continuación sus declaraciones:


VICTOR ALVARADO

—¿Qué opinión le merece la decisión del presidente Alan García, de disponer mediante la RS 254-2011-DE el traslado de los restos del general Miguel Iglesias a la Cripta de los Héroes del cementerio Presbítero Maestro?

Vemos en la citada resolución una inusitada prisa en ejecutar posiblemente un pedido del gobierno de Chile, el cual nunca ha disimulado su admiración y defensa de Iglesias, pero lo que es más grave, la comisión oficial designada para esta tarea ha excluido a las instituciones patrióticas éticamente llamadas a pronunciarse al respecto, como la Orden de la Legión Mariscal Andrés Avelino Cáceres, que me honro en presidir, seguramente porque sabían que no hubiésemos consentido tamaño despropósito.

—¿Cuáles son los cuestionamientos históricos que pesan sobre el general Miguel Iglesias?
Tenemos varios cuestionamientos. Primero, que no es cierto como dice la citada resolución que Miguel Iglesias fue el vencedor de las batallas de San Juan de Miraflores del 13 de enero de 1881, porque allí vencieron los invasores chilenos, y, segundo, porque fue uno de los felones y traidores que optaron por el derrotismo y, lo que es peor, por su conducta entreguista al haber interpuesto sus intereses económicos a los sacrosantos intereses de la Nación.

—¿En qué momento de su vida Iglesias habría concertado con los invasores?
Desde la noche misma del 13 de enero de 1881, unas horas después de haber sido tomado prisionero, se convirtió en vocero de los invasores, de allí la quemante acusación de Andrés Avelino Cáceres en una de sus cartas escritas al fragor de la guerra: “Yo no veo en Iglesias sino a un teniente chileno que obedece a los propósitos chilenos, que vive bajo la sombra de los chilenos”.

—Parodiando una expresión de Mario Vargas Llosa en su libro “Conversación en la catedral”, ¿en qué momento se jodió Iglesias?
La defección de Iglesias es anterior al colaboracionismo que mostró con los invasores luego de la derrota en las batallas de San Juan de Miraflores. Baste decir que como ministro de Guerra del dictador Nicolás de Piérola fue responsable principal del caótico plan de defensa que presentó Lima al invasor chileno. Tuvo más de un año para organizar una adecuada defensa y no lo hizo, dedicándose más bien a otros afanes desgraciados, según describen las crónicas de la época, particularmente Manuel González Prada.

—¿Podría describir esos afanes desgraciados de Miguel Iglesias?
El primero de todos, al partir en dos el Ejército del Sur, con lo cual condenó al holocausto al coronel Francisco Bolognesi y a los suyos, luego apartando a los militares de carrera e improvisando coroneles entre sus amigos “los notables”, después aplaudiendo como fiel vasallo el absurdo plan de su caudillo (Piérola) que fortificó el cerro San Cristóbal creyendo que los invasores vendrían a Lima por la sierra, descuidando la preparación de la reserva, y lo que es más grave, la de las tropas colecticias (gente nueva y sin disciplina) llegadas del interior, que no sabían manejar las antiguas armas que portaban, por lo que solo pudieron servir de carne de cañón en San Juan y Miraflores, a pesar de su heroísmo sublime.

—¿Podemos decir, por lo tanto, que Iglesias fue uno de los responsables de la victoria de los invasores chilenos?
Iglesias, siendo ministro de Guerra, fue uno de los dos principales responsables de la tragedia, porque facilitó con su ineptitud la victoria de los invasores. Miguel Iglesias luchó contra Chile solo unas horas el 13 de enero de 1881 para pasar después a actuar como parlamentario chileno, proponiendo la rendición total.

—¿Hubo dudas de su integridad como militar en la acción de resistencia frente a los invasores?
El mayor Julio C. Guerrero, en su ensayo “La guerra de las ocasiones perdidas”, inserta un testimonio, según el cual, Miguel Iglesias confió a un oficial peruano, también prisionero por los invasores, que sería de inmediato liberado, como sucedió realmente.

—¿Después de la ocupación de Lima por los invasores, registrada el 17 de enero de 1881, apenas cuatro días después de la derrota en San Juan y Miraflores, Iglesias continuó en las filas militares?
Miguel Iglesias optó por retirarse a sus feudos de Cajamarca a esperar el desenlace de la guerra. Para desgracia del Perú no permaneció inactivo, sino que se acercó a Lizardo Montero, quien había sido nombrado por Piérola como jefe superior político y militar del norte, con sede en esa ciudad. Y en mala hora Montero lo nombró jefe del Ejército del Norte.

—¿Hizo alguna labor notable al frente de este importante cargo?
Desde este cargo Miguel Iglesias esperó solo el momento oportuno para dar un golpe de Estado, trabajando de consuno con los publicistas que en varias ciudades del norte hacía propaganda por el derrotismo cuando en varias regiones del país se había desatado la Guerra de Resistencia Nacional, liderada por el general Andrés Avelino Cáceres. La Razón.

FRASES DE OLLANTA

A continuación las principales frases del discurso que ofreció Humala en el Congreso tras ser investido como nuevo mandatario para el período 2011-2016:

- "A los que demandan salarios y derechos les digo que no bajen sus banderas pero que sepan que todo cambio, para ser sostenible, debe ser gradual y racional".

- "A la oposición la llamo a la responsabilidad. Le pido vigilancia y que desde su posición respete también el mandato de las urnas, su mandato y el nuestro".

- "Las ganancias extraordinarias de las empresas mineras deben contribuir al esfuerzo nacional en pro del combate contra la pobreza".

- "El incremento desmedido de los conflictos, muchos de ellos absurdamente violentos, nos demuestra, día a día, que es urgente reparar las injusticias, corregir el rumbo y restablecer el diálogo en nuestra sociedad".

- "Mantendremos y consolidaremos un crecimiento sano de la economía y sus estándares macroeconómicos; respetaremos las reglas fiscales para afrontar eventuales crisis externas o desastres naturales".

- "Nuestro desafío es realizar esta gran transformación de manera gradual y persistente para que no se acompañe de presiones desestabilizadoras de nuestros equilibrios presupuestarios y macroeconómicos".

- "La corrupción es un elemento que debilita al Estado y afecta su desarrollo. Defiendo la imprescriptibilidad de los delitos de corrupción en agravio del Estado y la inhabilitación a perpetuidad contra sus autores o cómplices para el ejercicio futuro de cualquier función pública".

- "Ratifico mi compromiso de desarrollar una política exterior multilateral de cara a nuestra región que tanto ha cambiado en la última década. La integración en el marco de Unasur y la Comunidad Andina de Naciones será la línea principal de acción".

- "La solución pacífica de los litigios internacionales es la filosofía que me inspira y particularmente en relación a nuestros diferendos con Chile. Seguros de los fundamentos de nuestra causa, que defiendo ardientemente, afirmo que acataremos el fallo del tribunal de La Haya en nuestro reclamo sobre la frontera marítima y estoy convencido que Chile hará lo mismo".

DISCURSO DE OLLANTA EL 28 DE JULIO

Jueves, 28 de Julio 2011 | 2:25 pm

.




Tras asumir la Primera Magistratura del Estado, el mandatario Ollanta Humala pronunció un discurso de aproximadamente una hora de duración. A continuación la transcripción íntegra de las palabras del flamante dignatario:

Recibo con humildad y profundo fervor patriótico el cargo de Presidente de la República.

Declaro ante el Congreso, ante los presidentes amigos aquí reunidos y ante el pueblo peruano que, fiel al mandato de las urnas y en pleno respeto al Estado de Derecho, dedicaré toda mi energía a sentar las bases para que borremos definitivamente de nuestra historia el lacerante rostro de la exclusión y la pobreza construyendo un Perú para todos, atento siempre, en los más frágiles de nuestros hermanos. Exigiré el mismo compromiso y la misma energía a todo el equipo que me acompaña en el Ejecutivo.

La democracia peruana será plena cuando la justicia y la paz social, la soberanía nacional y la seguridad de nuestras familias constituyan el zócalo de nuestra nación, cuando la igualdad sea patrimonio de todos y la exclusión social desaparezca aún en los lugares más remotos del país. Queremos que la expresión misma de “exclusión social” se borre para siempre de nuestro lenguaje y de nuestra realidad. Asumiré este reto con mi palabra y con mi vida.

Hace casi un siglo, en 1914, Víctor Andrés Belaúnde, uno de los grandes intelectuales y políticos del siglo XX, al terminar un discurso en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, lanzó a los jóvenes una proclama que era, al mismo tiempo, un grito de batalla y una demanda: ¡QUEREMOS PATRIA!

Esta proclama años después fue recogida por José Carlos Mariátegui y Víctor Raúl Haya de la Torre para convertirla en pensamiento y acción. Esa reivindicación de la patria y de la Nación ha sido, como ahora, el sueño encendido de generaciones y de pueblos.

Desde la fundación de la República, la patria constituye una aspiración al destino común, una esperanza, una promesa inacabada por la que el pueblo peruano ha estado siempre dispuesto a entregar su vida en la paz y en la guerra, para defenderla y para legarla a sus hijos con orgullo y con fe.

La patria es nuestra Historia común, es el espacio donde todos los peruanos y peruanas queremos vivir en paz y en democracia. Por ello todos nos sentimos orgullosos de nuestra bandera, símbolo de nuestras luchas y de nuestro amor a la paz.

Esta aspiración a una patria inclusiva es la que abre el camino al progreso social. Para hacerla posible nos presentamos ante el pueblo y por eso estamos aquí. Asumo este reto como un desafío y como una promesa que expreso hoy ante todos los peruanos, y especialmente ante mis hijos y ante todos los niños y niñas de este país, los que serán el Perú de mañana. Este es nuestro patrimonio más rico. Por ellos y para ellos voy a cumplir mi promesa de hacer de este país un lugar donde todos disfruten del mismo derecho a la plenitud y a la felicidad, a una vida digna y a una vejez protegida.

Peruanas y peruanos:

El cinco de junio una mayoría de ciudadanos expresó su deseo de que el crecimiento económico y la inclusión social marchen juntos para transformar nuestro país en una patria de oportunidades para todos.

El incremento desmedido de los conflictos, muchos de ellos absurdamente violentos, nos demuestran, día a día, que es urgente reparar las injusticias, corregir el rumbo y restablecer el diálogo en nuestra sociedad.

El Perú es un país plurilingüe y multicultural. Esta múltiple diversidad constituye sin duda nuestra mayor riqueza. Sin embargo, durante mucho tiempo ha existido un discurso y una práctica de la exclusión, del rechazo a la diferencia, un “tú no eres igual que yo” que cobijó la discriminación y la intolerancia. Esto resulta cuando menos extraño porque los comportamientos excluyentes provienen muchas veces de quienes elogian nuestra diversidad cultural.

Pero, precisamente esa diversidad cultural proviene de entender, que nuestra nación es un crisol de razas y tradiciones. Son ellas las que sustentan, por ejemplo, nuestra extraordinaria gastronomía, hoy admirada y reconocida en el mundo. Porque somos diferentes, pero iguales en el fondo, labramos nuestra existencia en el trabajo y en el esfuerzo cotidiano. Somos mezcla y creatividad. Somos imaginación y trabajo. Y esta diversidad, que queremos integradora y no marginadora, constituye el fundamento de nuestra riqueza.

Nuestro país trabajador, honrado y diverso, se encuentra fracturado y herido. Sufre el abandono de los políticos y de un Estado insensible, burocrático y centralista. Un Estado que le ha dado la espalda al interior del país, un Estado que sufre de “mal de altura o soroche” y que se niega a subir los andes y extenderse en nuestra amazonía. Un Estado acechado por la corrupción y el despilfarro, alejado de sus ciudadanos, incapaz de protegerlos de la violencia y la criminalidad.

Sueño con un Perú donde la vida no sea un riesgo, donde las ciudades sean espacios seguros donde el ciudadano se encuentre protegido. Para esto necesitamos más estado, más patria y que la corrupción sea sancionada.

La democracia expresó en las urnas un mandato y ese mandato debe ser honrado. Restablecer el valor de la palabra empeñada ante el pueblo constituye el eje de la recuperación de un sistema de valores éticos inherentes a la República.

Sin embargo, transformar el país no es tarea fácil. No solo porque el cambio es siempre una tarea de multitudes, sino porque también implica enfrentar y superar nuestros problemas, proponer una nueva manera de convivir. La realidad exige transformaciones para que la igualdad, la tolerancia, el reconocimiento de nuestra diversidad y un desarrollo que nos incluya a todos sea, al mismo tiempo, un acto civilizatorio y un compromiso colectivo. La realidad nos interpela diariamente y nos exige un nuevo contrato social que haga posible la convivencia armoniosa de todos los peruanos.

Evoco aquí nuevamente la figura de Haya de la Torre y su legado, plasmado singularmente en la Constitución de 1979, la ultima constitución de origen democrático, a la que muchos no la han respetado y por eso la olvidan, que constituye para mí una verdadera inspiración por su contenido nacional, democrático y de libertad.

El gran Nelson Mandela, en un célebre discurso pronunciado en el marco de la UNESCO, afirmó, con la convicción que lo caracterizaba, que la igualdad, la equidad económica y la justicia social eran la base de toda democracia. El dijo: “No hay democracia con miseria, no hay democracia con asimetrías sociales”. Y porque creo en la justicia de esta frase, yo he jurado respetar y defender la democracia. Fortalecerla en sus valores igualitarios para hacerla legítima ante el pueblo y así será.

Hoy ante ustedes ratifico este juramento. Quiero que vean en mí a un verdadero soldado de la República, a un celoso guardián del Estado de Derecho y a un defensor de los derechos humanos y de la libertad de prensa y de expresión.

El historiador Jorge Basadre afirmaba ya en 1931 que “el Perú debía terminar su proceso de formación histórica. Dentro de él, vinculado más que nunca al continente y a la humanidad, el país debe encontrar su realidad y su solución” Por eso, para buscar y encontrar una solución integradora para ese Perú, para nuestro Perú “de compartimentos estancos” que describe Basadre, proponemos una Gran Transformación, el inicio de una nueva época, que no es otra cosa que una nueva convivencia entre todos los peruanos.

Nuestra administración será un gobierno para todos.

Las características de este gobierno pueden resumirse en los siguientes términos: reforma, democracia, libertades, inclusión, redistribución, crecimiento, paz con justicia, seguridad, descentralización, transparencia, soberanía y concertación.

Nuestra voluntad no es la de copiar modelos, queremos, como Basadre que el Perú deje de ser el espacio problemático que era y sigue siendo, queremos para ello construir un camino propio, un modelo peruano de crecimiento con estabilidad, democracia e inclusión social. Tomaremos como ejemplo lo bueno de otras experiencias, pero como decía el amauta José Carlos Mariátegui, no habrá calco ni copia sino creación heroica.

El mandato al que hicimos referencia exige responsabilidad en la conservación de los valores sociales, económicos y culturales de lo realizado hasta ahora y que son un patrimonio de todos.

Por esa razón, mantendremos y consolidaremos un crecimiento sano de la economía y sus estándares macroeconómicos; respetaremos las reglas fiscales para afrontar eventuales crisis externas o desastres naturales; la construcción de las obras de infraestructura, grandes y pequeñas; los programas sociales; la promoción del turismo y de la cultura peruana y honraremos los acuerdos comerciales con países y bloques amigos.

Fomentaremos una economía nacional de mercado abierta al mundo que haga realidad nuestro compromiso de crecimiento con inclusión social y democracia.

Esto implica que el Estado sirva como promotor no solo del crecimiento, sino también del progreso social. Priorizando educación, salud y nutrición infantil, mejorando las condiciones de trabajo, particularmente los CAS y Servicios No Personales. Invirtiendo en infraestructura, en escuelas, en postas médicas, en Cunas y mejorando el salario básico.

Un Estado que utilice sus recursos para ayudar a regularizar la informalidad, que ofrezca crédito ventajoso para los pequeños y medianos empresarios y que facilite el espíritu emprendedor de los peruanos que desea abrir su negocio y prosperar.

Quiero aprovechar aquí para transmitirles que el Salario Mínimo Vital de los trabajadores sujetos al régimen laboral de la actividad privada tendrá un aumento inmediato de 75 soles a partir de agosto y de 75 soles más en 2012, para alcanzar así los 750 soles. Pero estos aumentos deben propiciar un proceso continuo de revalorización del salario básico ligado a la productividad y al crecimiento económico, relacionado con una política global de reducción de la informalidad y de preservación y fortalecimiento de las pequeñas y medianas empresas.

Nuestro desafío es realizar esta gran transformación de manera gradual y persistente para que no se acompañe de presiones desestabilizadoras de nuestros equilibrios presupuestarios y macroeconómicos.

Nuestro ideal de cambio no se concibe sin concertación, sin diálogo político y sin el protagonismo de la gente. Con ese propósito, instalaremos un Consejo Económico y Social, en base al actual Acuerdo Nacional cuyas políticas hemos suscrito. Este Consejo será dirigido desde la Presidencia de la República con el acompañamiento del Presidente del Consejo de Ministros, y estará integrado por empresarios, trabajadores y representantes de la sociedad civil. Se abocará a elaborar estudios para la implementación de políticas públicas del gobierno y tendrá un carácter consultivo.

Hacer de la inclusión social una prioridad exige que el conjunto de los programas sociales sean agrupados y articulados en un Ministerio de Desarrollo y de Inclusión Social, para que el desarrollo pueda llegar efectivamente a los que más lo necesitan.

El programa JUNTOS será extendido progresivamente hasta alcanzar los 800 distritos más pobres del país.

Los adultos mayores en situación de pobreza y que no reciben ningún beneficio del Estado deben recibir la solidaridad de la nación. Hogares donde a la edad avanzada se conjuga el sufrimiento de la pobreza, exigen una acción social impostergable. A esos hogares haremos llegar los 250 soles del programa PENSIÓN 65. Su implementación será inmediata y alcanzaremos los 800 distritos más pobres del país progresivamente.

El programa Cuna Más para los niños de 0 a 3 años también se aplicará gradualmente y en los 800 distritos de pobreza extrema del Perú, hoy en la base del programa Juntos. El combate a la desnutrición infantil será una prioridad, apoyado en la implementación de un programa de nutrición infantil que comprenderá desayunos y almuerzos en las escuelas.

Haremos los esfuerzos que sean necesarios para que se alcance en todo el sistema educativo la jornada de 8 horas de estudio e incentivar la cultura del deporte y la recreación, potenciando las competencias interescolares en el campo de la cultura y las disciplinas deportivas, como respuesta al alarmante dato que más de un tercio de alumnos en las grandes ciudades del Perú corren riesgo de obesidad.

Iniciaremos el programa ‘Beca 18’, que integrará los programas existentes y que permitirá que los jóvenes de bajos recursos económicos y con alto rendimiento escolar puedan continuar sus estudios de nivel superior en instituciones públicas y/o privadas, en programas universitarios o de técnicos superiores.

Reforzaremos el sistema de acreditación universitaria. Los títulos a nombre de la nación que en algunos casos prácticamente se regalan, tendrán un riguroso procedimiento nacional en salvaguarda de la calidad educativa.


En el ámbito de Salud, fortaleceremos el sistema de salud e instalaremos el Sistema de Atención Móvil de Urgencia (SAMU) con una experiencia piloto en Lima y tres capitales de departamento y la creación de un Programa de Facilitación de Acceso a Genéricos de Calidad.

Reforzaremos la atención primaria en salud en los distritos más pobres del Perú.

En los próximos 5 años construiremos hospitales en cada una de las 50 capitales de provincia donde aún faltan. Haremos así realidad nuestro compromiso de tener por lo menos un hospital en cada provincia del Perú.

Los campesinos del Perú y, en general los pobres del campo, serán objeto de prioridad. AGROBANCO captará recursos para el otorgamiento de créditos a la agricultura familiar, y estableceremos módulos de desarrollo agrario accesibles a las distintas formas de asociaciones agrarias y de productores.

El Perú establecerá una nueva relación entre el Estado y el mercado, distinta de las fracasadas recetas extremas del Estado intervencionista o del Estado mínimo y excluyente. En esa nueva relación, el Estado será un promotor de la inversión y del desarrollo, garante del ejercicio de los derechos y libertades, impulsor de las oportunidades para todos.

Buena parte de los conflictos del planeta se deben a la carencia de agua. No es posible que el Perú que queremos construir no desarrolle una política de aprovechamiento soberano de los recursos naturales, una política que garantice la explotación racional y equilibrada del agua, la tierra, los bosques, la biodiversidad, el gas y los minerales. Esos recursos de todos los peruanos contribuirán a la eliminación de la pobreza y la desigualdad. Se alentará la actividad privada sobre los recursos naturales, pero estos serán explotados en condiciones de respeto a las poblaciones, a los trabajadores y al medio ambiente.

Asimismo, avanzaremos profundamente en la política de ordenamiento territorial que nos permita establecer de manera participativa el uso racional de nuestro territorio.

Las ganancias extraordinarias de las empresas mineras deben contribuir al esfuerzo nacional en pro del combate contra la pobreza. Los contratos serán respetados y la negociación permitirá, no lo dudo, y repito no lo dudo, que esta significativa contribución beneficie a todo el país. Mi determinación es muy clara, tengo la voluntad y la convicción para alcanzar este objetivo. En ello va mi palabra y mi compromiso con el pueblo peruano.

El gas del Lote 88 de Camisea, será orientado prioritariamente hacia el consumo interno.

Ejecutaremos una política de masificación del consumo del gas natural para llevarlo a los hogares. En 5 años la ciudad de Lima podría contar con aproximadamente 400.000 conexiones.

Con la garantía de cumplir con la legislación vigente que establece la obligatoriedad del abastecimiento del mercado interno, implementaremos acciones para que se reduzca significativamente el precio del balón de GLP, lo que repercutirá favorablemente en la economía de la mayoría de la población peruana, sin introducir distorsiones en el mercado, ni fomentar el contrabando. Asimismo, masificaremos el uso del GNV como combustible barato y accesible a todos.

Insistiremos en la diversificación de la matriz energética a favor del gas y las energías renovables e impulsaremos el desarrollo de la industria petroquímica. En esa medida fortaleceremos la regulación y el acceso competitivo a las fuentes de energía para el transporte, evitando los sobreprecios.

Promoveremos la construcción de hidroeléctricas, fortaleciendo Electroperú y a las empresas eléctricas estatales regionales, y promoviendo las privadas, en un adecuado balance que otorgue prioridad a la demanda nacional. El Estado evaluará la participación de Electroperú en los nuevos acuerdos de inversión.

Reconstruiremos una verdadera Marina Mercante del Perú para ejecutar lo que dispone la Ley de Reactivación y Promoción de la Marina Mercante Nacional. Fortaleceremos el SIMA y ENAPU como empresas eficientes y buscaremos que la construcción de más aeropuertos se oriente también hacia el fomento el turismo.

Tomaremos las medidas necesarias para que el Perú tenga su línea aérea de bandera y que el mercado aéreo comercial sea más abierto y de mayor competencia, sobre todo para abaratar y ampliar la comunicación al interior del país.

En el campo de la infraestructura, se proseguirá con la ejecución de obras viales como los proyectos IIRSA Interoceánica del Sur, Interoceánica del Norte, los programas Costa-Sierra y apoyaremos la elaboración y construcción de proyectos ferroviarios.

El gobierno nacional será el principal aliado de los gobiernos regionales y locales. Una de nuestras primeras medidas será la instalación de un mecanismo de relación fluida del gobierno con los presidentes regionales, incluyendo el reconocimiento de la Asamblea de Gobiernos Regionales.

Para la ejecución de las políticas públicas nacionales, el gobierno realizará reuniones descentralizadas buscando el diálogo con las autoridades regionales, alcaldes y representantes de la sociedad. Los compromisos de mutua obligación serán objeto de seguimiento desde el gobierno.

Consolidaremos el proceso del presupuesto participativo. Fomentaremos la vigencia de los Consejos de Concertación Local y Regional ahora debilitados y en algunos casos hostigados, como expresión de un enfoque de gestión compartida.

En el caso concreto de Lima, que ha crecido de forma desordenada y caótica, daremos continuidad a la inversión en transporte público en la ciudad.

Anuncio que, en el plazo de dos meses, se iniciará una nueva etapa en la reconstrucción de los pueblos del sur afectados por el terremoto del año 2007, lo que se realizará con el concurso de los batallones de ingeniería de las FFAA.

El gobierno hace eco de la alerta mundial sobre cambio climático y se compromete a fortalecer la regulación y dedicarse con seriedad a las labores de preservación de nuestra biodiversidad, del recurso hídrico y de los glaciares. Será una prioridad para nosotros la prevención de desastres.

El gobierno siente que uno de los graves problemas que provoca temor y frustración en las personas es el de la inseguridad. Se arrastran en ello 30 años de fracasos y muy pocos éxitos y los que sufren las consecuencias de la violencia del crimen organizado, el narcotráfico y el pandillaje son los más pobres. Queremos cambiar esa historia de ausencia de liderazgo político y la carencia de una política de estado eficaz en esta materia.

Es necesario desterrar la idea de que la inseguridad es un problema exclusivo de la policía. Por eso anuncio que así como el Presidente de la República preside el Consejo de Defensa Nacional, presidiré también un Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana y Política de lucha contra la Criminalidad para darle un carácter multisectorial.

Realizando un esfuerzo financiero del Estado, iniciaremos un proceso gradual de eliminación del sistema 1 x 1 en el servicio policial. Incrementaremos los salarios de la policía en el marco de un sistema más amplio que incluya la reforma de remuneraciones de la PNP. Activaremos un Servicio Policial Voluntario, equiparemos y conectaremos a las comisarías a la red digital, estableceremos penales fuera de Lima y de las principales zonas urbanas del país implementaremos el trabajo físico para condenados por graves delitos. Disuadiremos con penas más altas el uso de armas de fuego en la comisión de delitos de cualquier índole. En mi gobierno no habrá perdón para violadores, ni para ningún delito cometido contra un niño o una niña. Combatiremos el feminicidio y propondremos una revisión de la legislación vigente.

Ejecutaremos una política contra las drogas que consolide el modelo peruano de desarrollo alternativo integral y sostenible para convertir a los productores, hoy ilegales, en agentes de una economía legal. No seremos indiferentes frente al incremento alarmante de drogas entre los adolescentes y jóvenes. Respetaremos el debate que en torno a este tema se ha abierto en estos años, dentro y fuera del país, pero nosotros no legalizaremos ninguna droga ni tampoco los cultivos ilícitos y por el contrario los vamos a combatir.

Nuestra política antidroga será soberana y reclamará que se haga realidad la responsabilidad compartida con los países consumidores. Seremos inflexibles en el control de los insumos químicos y el combate a las bandas de narcotraficantes.

Reduciremos la superficie ilegal de sembríos de coca, no permitiremos la extensión de cultivos ilegales, menos aún en parques nacionales y zonas ecológicas. Al mismo tiempo, el Perú podrá tomar la iniciativa de una Cumbre Presidencial Regional Antidrogas con la participación de los países productores y consumidores, a cuyos presidentes he percibido muy preocupados con este tema.

La corrupción es para nosotros un elemento que debilita al Estado y afecta su desarrollo. Es, por lo tanto, un problema de seguridad. En tal sentido, defiendo la imprescriptibilidad de los delitos de corrupción en agravio del Estado y la inhabilitación a perpetuidad contra sus autores o cómplices para el ejercicio futuro de cualquier función pública; propongo la supresión de las penas condicionales en las condenas por corrupción para que la prisión se cumpla de manera efectiva; y defiendo la eliminación de los beneficios penitenciarios en los casos de corrupción.

Debemos poner fin a las secuelas de la violencia terrorista que vivimos y cumplir con las reparaciones individuales y colectivas. Es necesario que las víctimas y deudos rehagan sus vidas personales y familiares, que miren con otros ojos su futuro porque viven en una patria que los incluye y que los reconoce como peruanos.

En cuanto a la Defensa nacional, en primer lugar queremos recuperar la moral de nuestras Fuerzas Armadas y equiparlas de forma adecuada. Se reformará el sistema remunerativo de las FFAA buscando cerrar la brecha salarial que existe entre los distintos grados. Esto se hará salvaguardando la obligación que tiene el Estado de honrar el pago de pensiones, que es un derecho fundamental consagrado.

Mantendremos la pensión renovable y realizaremos ajustes salariales graduales. Nuestra primera inversión militar será en el soldado. Fortaleceremos el Servicio Militar con incentivos, mejorando el pago a los conscriptos e instalando un Instituto Tecnológico de las FFAA para la enseñanza de especialidades a quienes egresan del Servicio Militar.

Ratifico mi compromiso de desarrollar una política exterior multilateral de cara a nuestra región que tanto ha cambiado en la última década. La integración en el marco de UNASUR y la Comunidad Andina de Naciones será la línea principal de acción.

La solución pacífica de los litigios internacionales es la filosofía que me inspira y particularmente en relación a nuestros diferendos con Chile. Seguros de los fundamentos de nuestra causa que defiendo ardientemente, afirmo que acataremos el fallo del tribunal de La Haya en nuestro reclamo sobre la frontera marítima y estoy convencido que Chile hará lo mismo.

Vivimos en un mundo que cambia día a día y donde emergen nuevos poderes regionales. Las condiciones están dadas para llevar adelante una fructífera integración en la región. No deseamos una economía autárquica, que se mire a sí misma, aislada del proceso de globalización. Queremos, más bien, una economía integrada. Integrada, en primer lugar, con la región y, en especial, con nuestros vecinos andinos y sudamericanos.

Nuestra región es inmensa y rica en recursos pero también en historia y en culturas comunes. Yo les quiero recordar que nuestra independencia fue un proceso regional, donde todos nos hermanamos para lograr nuestra libertad y soberanía. La heroica gesta de nuestros próceres como el general don José de San Martín y el libertador Simón Bolívar, siempre conscientes de la urgencia de la unión de los pueblos de América, fueron los precursores del impulso integrador del presente.”Seguramente, escribía Bolívar, la unión es la que nos falta para completar la obra de nuestra regeneración”. Este es aún objetivo pendiente para todos los pueblos de América.

El gobierno se propone reconocer y reivindicar a los 3 millones de peruanos migrantes. Para empezar, mejoraremos la defensa consular de los peruanos en el exterior y rebajaremos el costo de las remesas mediante convenios que realizará el Banco de la Nación. Deseamos que quien desea regresar lo haga y para ello fomentaremos que sea sujeto de crédito.

Los detalles de estas políticas aquí señaladas serán presentadas por la presidencia de Consejo de Ministros, como corresponde, ante el parlamento.

De la tradición militar que no olvido y llevaré en el corazón hasta la muerte conservo orgulloso la tenacidad, la austeridad y el amor por el Perú y sus intereses. En esa tradición, a diferencia de lo que piensan algunos, se sabe mandar pero también obedecer, hay jerarquía pero también fraternidad, hay disciplina pero también intercambio de opiniones.

Esa tradición se funde con el espíritu generoso del Perú, lejano al odio. No vengo en son de guerra sino en son de paz, sin venganza y sin rencor. Yo, que he sido acusado casi de todo, he aprendido a perdonar hace muchos años, antes incluso de hacer política.

Por eso, a los que aún persisten en el encono les pido que bajen sus espadas y sus lanzas.

A los que demandan salarios y derechos les digo que no bajen sus banderas pero que sepan que todo cambio, para ser sostenible, debe ser gradual y racional.

A mis partidarios les pido consecuencia, lealtad, sacrificio, inteligencia y honradez.

A la oposición la llamo a la responsabilidad. Le pido vigilancia y que, desde su posición, respete también el mandato de las urnas, su mandato y el nuestro.

Al terminar reitero que solo soy un soldado de la democracia.

Hay patria para todos
¡Viva el Perú!

TIEMPO NUEVO

(1) Legislador Abugattás fue el encargado de ponerle la banda presidencial al mandatario. (2) Ni bochornosa actitud de Martha Chávez pudo evitar fiesta democrática en hemiciclo.




Chávez llegó a decir que Ollanta Humala era un gobernante usurpador, golpista y lanzó una amenaza que se puede entender como una declaración de guerra: “(Ollanta) no vas a poder hacer nada”, dijo desde su curul. Testigos dijeron que Chávez invocó a las Fuerzas Armadas a dar golpe de Estado contra el nuevo presidente.


Ni los desaforados gritos de Martha Chávez pudieron empañar fiesta democrática en el Congreso. Algunos llegaron a escuchar a Chávez decir que las Fuerzas Armadas deben dar golpe a Ollanta Humala.

La juramentación de Ollanta Humala como presidente de la República, en la que invocó el espíritu, los principios y valores de la Constitución de 1979, desencadenó una furiosa reacción del Fujimorismo, principalmente de Martha Chávez, quien gritó tantas barbaridades que llegó a decir, según testigos, que las Fuerzas Armadas deben derrocar al nuevo gobierno, en presencia de la mayoría de mandatarios sudamericanos.

Chávez explotó cuando el flamante presidente del Legislativo, Daniel Abugattás, tomó el juramento de rigor al mandatario electo, quien leyó un pergamino del Congreso que enfatiza de manera expresa su respeto al orden constitucional, pero seguidamente recoge el espíritu y los principios de la Carta del 79.

Fujimoristas desbocados
Esta alusión fue respondida de mala manera, a gritos desaforados, por Chávez y otros legisladores Fujimoristas, irritados por considerar que la fórmula usada por el presidente estaba desconociendo la Constitución de 1993, actualmente en vigencia, y que fue promulgada por el exdictador Alberto Fujimori, quien purga condena por violación de los derechos humanos y corrupción.

Tras juramentar al jefe de Estado, Abugattás de inmediato hizo lo propio con los vicepresidentes de la República, Marisol Espinoza y Omar Chehade, quienes juraron por la Carta Magna del 79. Esto incomodó aún más a los Fujimoristas, que con la voz cantante de la congresista Chávez, exigían sometimiento a la Constitución de 1993.

Los congresistas de las demás bancadas, especialmente los de Perú Posible, también se quedaron estupefactos, pero en rápida reacción cayeron en la cuenta que el presidente había jurado respetar el actual orden constitucional (léase Constitución de 1993) y que la mención a la Carta del 79 era una alusión de principio que no significaba el rechazo a la actual.

Martha Chávez continuó su bochornosa actitud, mientras el flamante mandatario leía su mensaje a la Nación. La Fujimorista reclamaba a viva voz que la juramentación no era válida y por lo tanto se trataba de un presidente de facto.

La situación era tan incómoda que sus colegas de otras bancadas le pedían que se callara. En un momento, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, volteó, se puso sus anteojos y miró hacia donde estaba ella.

Los legisladores de Gana Perú acallaban sus palabras con el estribillo ¡No a la corrupción!, mientras desde las galerías le recordaban el caso La Cantuta, matanza de nueve estudiantes y un profesor de la citada casa de estudios, que Chávez avaló.

Luz Salgado llegó a subir a la Mesa Directiva, mientras el presidente leía el mensaje, y le increpó a Abugattás con la Constitución del 93 en mano. Durante el incidente, la congresista Fujimorista dejó caer el ejemplar al piso, hecho que Martha Chávez utilizó después para decir, faltando a la verdad, que el presidente del Congreso había arrojado la Constitución.

Sesión Solemne
A las 10 de la mañana, Abugattás dio por iniciada la histórica sesión solemne, la cual no contó con la presencia del presidente saliente Alan García (quien entregó la banda presidencial en el Palacio de Gobierno al jefe de la casa militar).

Minutos antes llegaron los presidentes y otros invitados, entre ellos el expresidente Alejandro Toledo, así como los titulares del Poder Judicial, César San Martín, y del Tribunal Constitucional, Carlos Mesía, así como el fiscal de la Nación, José Peláez, y otras autoridades judiciales.

En las galerías estaba Nadine Heredia, esposa del presidente, y sus pequeños Nayra, Illari y Samin, quienes dieron un toque de alegría a la ceremonia. En otra galería estaban Isaac Humala y Elena Tasso, padres del mandatario y, junto a ellos, las hermanas del jefe de Estado y Ulises, el mayor de la prole.

Apenas iniciada la sesión, Abugattás recibió la banda presidencial enviada desde Palacio por García y se la colocó por varios minutos. Después leyó la propuesta de la conformación de las tres comisiones congresales encargadas de anunciar y recibir al presidente de la República, así como a los altos dignatarios visitantes.

La “comisión de anuncio”, presidida por el congresista José Urquizo, e integrada por Pedro Spadaro, Marco Falconí, Luis Iberico y Esther Capuñay partió hacia el Palacio de Torre Tagle (sede de la Cancillería) donde se encontraba Ollanta Humala con el encargo de invitarlo a concurrir al Congreso para la Transmisión del Mando Supremo.

Para el recibimiento de los presidentes latinoamericanos se nombró otra comisión, presidida por Fredy Otárola, la cual dio la bienvenida a Rafael Correa (Ecuador), Sebastián Piñera (Chile), Dilma Rousseff (Brasil), Evo Morales (Bolivia), Cristina Fernández (Argentina), Juan Manuel Santos (Colombia) y José Mujica (Uruguay) y otros mandatarios.

Para recibir al presidente electo, el Congreso también nombró otro grupo, encabezado por la congresista Ana María Solórzano, e integrada por Kenji Fujimori –quien, a diferencia de la furiosa actitud de Martha Chávez, saludó con amabilidad al mandatario- Willyam Valle, Gabriela Pérez del Solar y Gustavo Rondón.

Durante la espera, la congresista de Gana Perú, lanzó arengas a favor de la gran transformación con Ollanta Humala, las cuales se combinaba con las frases “Ollanta honestidad” y “Ollanta presidente”.

Las vivas también se hicieron sentir cuando el presidente electo entró al hemiciclo al compás de la marcha de banderas, con cierto retraso, y saludó uno a uno a los ilustres visitantes de los países hermanos. En tanto, desde los escaños y las galerías el grito de ¡Sí se pudo! dominaba el hemiciclo.

CRISIS SE HEREDA

Oswaldo de Rivero





Malaventurados los jóvenes porque ellos heredarán la crisis




La juventud estadounidense y la europea están tomando conciencia de que son una “generación perdida” como consecuencia de una política anticrisis que ha consistido en aplicar “seguridad social” al capital y austeridad a los ciudadanos.



Los jóvenes norteamericanos están pagando la factura de una economía capitalista financiera que ha destruido la economía real. Respecto a Europa surgieron movimientos de jóvenes “indignados” que protestan porque pagan una crisis que ellos no ocasionaron.

La elite política es la culpable del empeoramiento de la crisis por haber dejado a sus países en manos de los especuladores de bonos y de banqueros irresponsables

Uno de los hechos más representativos de esta situación es un cartel en Atenas que dice: “¿Papa de qué lado estabas tú cuando los políticos estaban dilapidando el país?”

Los jóvenes se sienten así traicionados por una generación de políticos, que ha antepuesto sus intereses personales y los del casino financiero, a los intereses de una nueva generación que no es responsable del Crash del 2008.

Similar situación se vive en el mundo, según la OIT, como consecuencia de la crisis, el Desempleo juvenil mundial alcanzó el 13%, la más alta de su historia.

La bonanza económica de casi 10 años no redujo el Desempleo juvenil, que alcanza el 18% y los jóvenes peruanos no son ajenos a esta crisis.

El nuevo gobierno debe estar consciente que la bonanza causada por los precios de los minerales no va a ser eterna. China, nuestro principal importador, debido a la reducción del consumo en Estados Unidos y Europa, está exportando menos e incluso recurre a préstamos de los bancos, que puede crear una burbuja financiera y una crisis adicional a la norteamericana y la europea.

Frente a este peligro la dirigencia china ha dictado medidas para enfriar la economía que reducirán el crecimiento del PBI y con ello la colosal demanda de minerales. Es así posible que el Perú, dentro de un año, no cuente con una fuerte locomotora china para crecer como antes. Y a esto se unirán el alza imparable de los precios del petróleo y de los alimentos que importamos.

¿Ha pensado en este escenario el próximo gobierno? Si no lo ha hecho es mejor que lo haga y tenga un plan B porque la situación económica internacional va ser mucho menos favorable para luchar contra la exclusión social juvenil, que es la mayor y la más peligrosa que sufre el país.

PESCADITOS

Columnistas Olger Linares |





Los nuevos monstruos




Los monstruos existen desde el alba del tiempo. Ahora los peces estamos viviendo nuestra pesadilla nocturna y final, con esto de la extinción, sufriendo la depredación criminal ejecutada por los nuevos monstruos llamados “harineros”.



Estos monstruos de camisa blanca y corbata, digitan todo desde unas cómodas oficinas, ni siquiera trabajan ellos mismos en los crematorios que han implementado a lo largo de la costa peruana, donde millones y millones de mis congéneres van a parar luego del secuestro efectuado por máquinas de hierro o madera que pescan a lo largo de nuestro mar. En los últimos 13 años, 87 mil millones de kilos de anchoveta han sido capturadas.

Lo peor de estos nuevos monstruos, es que ni siquiera nos capturan para alimentarse ellos mismos, menos aún para darnos como alimento a los peruanos. A pesar de su propia riqueza marina –los peruanos capturan 9% de la pesca mundial- el 50% de sus niños sufren de anemia y el 22% de desnutrición crónica. En América, conjuntamente con Haití y Bolivia, lideran los más altos índices de tuberculosis.

Así y todo, luego de pescarnos, nos bombean al interior de las naves y nos apilan en las bodegas hasta hacernos reventar por el propio peso de nosotras mismas, luego nos incineran, nos embalan en sacos y nos exportan para formar parte de alimentos de pollos, cerdos, peces y otros animales que los extranjeros cultivan para su propio consumo. De cada 4,5 kilos de nosotras se produce solamente 1 kilo de harina de pescado.

Nada los detiene, ni las estadísticas mundiales que muestran que la sobrepesca ha acabado con numerosas especies, ni la reducción del tamaño de las restantes, debido a la pesca selectiva de los individuos de más talla. Ya desaparecieron del mar peruano a la sardina. Destruyendo una industria conservera que daba miles de puestos de trabajo a pobladores del litoral. Hasta pagan a técnicos para que vendan la idea que no es la sobrepesca la que acabó a la sardina. Sino…el llamado Fenómeno del Niño. Claro, en cierta forma tienen razón, su cuento sería como que no son las balas del pelotón las que finalmente matan al fusilado….sino el tiro de gracia del comandante del pelotón. Basta el raciocinio de un pececillo para comprender que, los Fenómenos del Niño han existido y convivido con la sardina por millones de años, y que el último de estos Fenómenos sólo pudo ser nefasto para una población de sardinas ya diezmada por la sobrepesca criminal a la que fue sometida.

Un ministro encargado, rey de la pesquería -quien luego como ministro de Defensa, demostró ser un especialista de la “píldora del día siguiente”- repartió como cuotas o botín de pesca, el 64% de nuestra población, a las 7 compañías dueñas de los más grandes crematorios, esto por 10 años, sólo que quizás nos acaben antes. Dicen que este nuevo gobierno dictará normas –no para protegernos de la extinción- sino para que podamos garantizar la alimentación de las generaciones futuras. Pero esto no se concretizará mientras los mismos nuevos monstruos se reciclen portando otras camisas y corbatas.

ESPIRITU DEL 79

¿Qué significado debe asignarse a la invocación de Ollanta Humala al espíritu y los principios de la Constitución de 1979?



Para el Fujimorismo, lo que ha hecho Ollanta es prácticamente un golpe de Estado.

Para la derecha que ha dirigido el país durante la década anterior, incluido el APRA, es un gesto retórico de reivindicación, tal cual podría ser juramentar por cualquier otro espíritu. Después de todo la beligerante Martha Chávez lo había hecho por su líder preso.

En los sectores populares, las bases nacionalistas y de izquierda, en cambio, el juramento de Ollanta es una bandera de esperanza, que nos hace recordar que todavía estamos prisioneros en la Constitución golpista pero no sometidos a ella.

Demuestra que el tema constitucional no quedó zanjado con las cartas al pueblo peruano, las hojas de ruta y los juramentos de campaña. Porque Ollanta nunca negó la necesidad de una nueva Carta Constitucional, aunque convino que no había aún condiciones para ese cambio.

Salgado, Chávez, Chacón, han dicho que el juramento de Ollanta es una provocación. Si fuera así, cayeron redonditas. Porque el país las vio pelear por el documento que en campaña no tuvieron reparos en declarar “su programa”, reclamando que el presidente se someta a él.

Que conste, Ollanta no ha derogado la Constitución del 93, ni la ha desconocido. Pero le ha opuesto una idea democrática. No olvidar que el artículo 307 de la Carta del 79 decía: “-Esta Constitución no pierde su vigencia ni deja de observarse por acto de fuerza o cuando fuere derogada por cualquier otro medio distinto del que ella misma dispone. En estas eventualidades todo ciudadano investido o no de autoridad tiene el deber de colaborar en el restablecimiento de su efectiva vigencia”.

Ollanta ha recogido este espíritu, como no lo hicieron Toledo ni García. Recién ahora se puede creer que los crímenes contra la Constitución y la democracia no prescriben.

MODERADO

Moderato cantábile




Los analistas coinciden en calificar de moderado el Mensaje inaugural del Presidente Ollanta Humala. El programa, moderado. Las promesas, moderadas.

El Presidente presentó principios decisivos. En primer lugar, al declarar que dedicará toda su energía para eliminar de nuestra historia “el lacerante rostro de la exclusión y la pobreza” y prometer que exigirá “el mismo compromiso y la misma energía” a todo el equipo que lo acompaña en el Ejecutivo.

Otro rasgo positivo es su promesa de establecer una nueva relación entre Estado y mercado, alejándose de las “recetas extremas del Estado intervencionista o del Estado mínimo y excluyente”. Buscará, dijo, que el Estado “sea promotor del desarrollo y la inversión”.

El jefe de Estado ha querido sin duda reafirmar lazos con las amplias mayorías que votaron por él en atención a su propuesta de cambio.

Positivo es que haya reiterado la promesa de cambios, pero en casi todos los casos se trata de formulaciones generales y ofertas recortadas. También hubo silencios penosos.

En dos sectores fundamentales se produjeron éstos: en el agrario y en el laboral. Hay en el agro problemas de toda índole: desde la reaparición del latifundismo hasta las amenazas contra las comunidades de sierra y selva; desde el abandono de la producción alimentaria de consumo interno hasta la protección excesiva de la agroexportación.

En el sector laboral hay abusos crispantes. Mario Huamán, secretario general de la CGTP, señaló ayer, después del Mensaje presidencial, problemas que no merecieron ni unas cuantas líneas del discurso: amenazas a la libertad sindical y a la negociación colectiva, la existencia de dos millones de trabajadores contratados bajo sistema de tercerización, subcontratación, services, honorarios profesionales y otros.

El Presidente ofreció establecer la jornada de ocho horas de estudio en todo el sistema educativo. Muy bien. Hubiera sido bueno también que propusiera restablecer la jornada de ocho horas de trabajo, conquista que se logró en 1919, hace casi un siglo.

Entre los reclamos nacionales que Humala asumió durante su campaña electoral está el de un impuesto a las sobreganancias mineras. El Mensaje moduló la demanda, remitiéndola a una contribución.

No fue preciso el primer mandatario al aludir al sector salud. Como ciudadano suscrito a Essalud y como periodista preocupado por los retos que existen en toda el área, pediría al jefe de Estado que recomiende a su inesperado ministro de salud que se entere de los problemas y consulte a los que sí saben.

Su propuesta contra la corrupción política merece aprobación ciudadana.

Las referentes a Marina Mercante, línea aérea de bandera, ferrocarriles son asimismo positivas y prometedoras.

Ojalá que el gradualismo propuesto por el Presidente no se vuelva postergación.

CONTINUIDAD Y RUPTURA

.Por Sinesio López Jiménez

La nación, decía Renán, es un plebiscito de todos los días. Es una comunidad de sentimientos basada en ciertos elementos objetivos compartidos: lengua, cultura, historia, territorio. Ella articula el pasado, el presente y el futuro dentro de una tensión permanente entre la continuidad y la ruptura. Ollanta abrió su discurso de toma de mando colocándose en ese horizonte. Planteó una continuidad en la reivindicación nacional (¡Queremos patria!) de los intelectuales más destacados que ha tenido el país (Víctor Andrés Belaúnde, Víctor Raúl Haya de la Torre, José Carlos Mariátegui, Jorge Basadre) y trazó una ruptura con el pasado de exclusión, de discriminación y de falta de reconocimiento de nuestras diferencias como país multicultural que no deben impedirnos, sin embargo, constituir una comunidad política unitaria. En ese horizonte es posible un futuro mejor para todos.

No hay, pues, un espíritu fundacional en su discurso sino más bien la voluntad de continuidad acompañada de las rupturas necesarias para hacer del Perú una patria de todos. El mismo espíritu está presente en el campo económico: continuidad del crecimiento económico, pero ruptura con la injusticia, la pobreza y la desigualdad que lo acompañaron en el pasado para reemplazarlas por una política de inclusión social. Como parte de ella formuló un conjunto de medidas (salario mínimo, ampliación del programa Juntos, pensión 65, CUNAMÁS, un hospital para cada provincia) y planteó el despliegue de una política de igualdad de oportunidades (revolución educativa, salud de calidad, justicia y seguridad para todos) que, juntamente con el impulso al crecimiento sostenido, constituyen la agenda de los 5 años de gobierno.

A este programa se añade la reivindicación del lote 88 del gas predominantemente para el consumo interno, la masificación del consumo del gas líquido para llegar a 400 mil familias en Lima en el lapso de cuatro años bajando sustantivamente su precio. El balón del GNP puede bajar el precio, pero en menor medida. Es una lástima que la lucha contra la corrupción no haya sido agresiva y coherentemente planteada. Solo se propone que los delitos de corrupción no prescriban, que los corruptos no gocen de beneficios penitenciarios y que ellos sean inhabilitados para el desempeño de las funciones públicas. Faltó proponer un plan coordinado de las instituciones de control horizontal, social y vertical y sugerir que el Contralor debiera ser nombrado y controlado por el Congreso.

Una característica del programa formulado es la gradualidad de su aplicación, teniendo en cuenta la inmensidad de las demandas y la no abundante disponibilidad de los recursos para atenderlas al comienzo del gobierno. Eso explica probablemente que Ollanta no se haya impuesto el pie forzado de los tradicionales cien primeros días de medidas espectaculares para luego desplegar las medidas ordinarias y de menor incidencia política. En realidad, todas las políticas de inclusión social tienen un fuerte impacto social y político y marcarán la agenda de todo el período de gobierno. La gradualidad de los programas sociales supone una cierta capacidad de espera. La pregunta que hay que formularse es si las masas movilizadas tienen capacidad de espera, especialmente las del sur andino. Mi impresión es que el hambre de pan y de justicia ya ha esperado demasiado y que va a ser necesario apretar el acelerador para aquietar la turbulencia social.

La reivindicación de la Constitución del 79 tiene el sentido simbólico de condena al golpe y a la corrupción del fujimorismo. El crecimiento con inclusión social sólo puede ser desarrollado mediante una política de concertación que se expresa claramente en la composición del gabinete, aunque en este se puede encontrar algunas concesiones innecesarias e inexplicables, dejando de lado a algunos cuadros tecnopolíticos de Gana-Perú que bien podrían contrarrestar a la derecha que pesa allí más de lo necesario. Espero que las angurrias de la derecha y las trampas de la política no destruyan a Ollanta, un hombre de buena fe, honesto y justo.

SANDIAGRA

.

Atención al género masculino. Consumir una rebanada de sandía genera efectos similares a los del viagra, según un estudio realizado por laUniversidad de Texas en Estados Unidos.

De acuerdo a Bhimu Patil, director del Centro de Mejoramiento de Frutas y Vegetales de la universidad estadounidense, la sandía contiene nutrientes con efectos parecidos al medicamento vgorizante que permite a los vasos sanguíneos estimularse y relajarse.

"Al consumirse, se convierte en arginina, un aminoácido que entre otras cosas mejora la producción de óxido nítrico y éste da el mismo efecto que tiene el viagra para tratar la disfunción eréctil y quizás prevenirla”, manifestó Patil.

La proteína, sin embargo, se encuentra más en la corteza por lo que los científicos no descartan producir nuevas variedades de esta fruta con mayores concentraciones de esta sustancia en la pulpa. (Fuente: peru.com)

NO A CORRIDAS

)
.

La cantante y compositora de música afroperuana, Susana Baca, quien mañana jueves 28 asumirá el liderazgo del ministerio de Cultura, calificó de “terrible” lo que las corridas de toro muestran. En una entrevista, ante la consulta de la posible eliminación de la tradición, aclaró que es un tema que debe “ver, porque es una gran discusión”.

“Yo siento muchísima lástima de un animal, yo recuerdo que me llevaron (de adulta) a una pelea de gallos y empecé a llorar (…) la gente pidió que me saliera”, declaró al noticiero Buenos Días Perú.

Por otro lado, la artista se refirió al delicado estado de salud de la chef Teresa Izquierdo y el cantante Pedro Suárez Vértiz. La primera se encuentra en cuidados intensivos por una obstrucción intestinal, mientras que el rockero sufre de un desorden nervioso que le provoca mala dicción.

La próxima funcionaria deseó lo mejor a ambos compatriotas, a quienes describió como “un ángel de la comida peruana” y “un niño que ha escrito cosas muy buenas para los jóvenes”, respectivamente.

Por otro lado, Baca De La Colina se negó a dar nombres de su equipo técnico, pues los nombres que ha propuesto están en evaluación.

BASES

DETALLES DE NOTASHumala ofreció sentar las bases para borrar del país el rostro de la pobreza


Mensaje. Al jurar, líder de Gana Perú invocó principios y valores de constitución del 79. Juramento presidencial provocó las iras del fujimorismo. “No vengo en son de guerra sino de paz, no vengo con rencor”, dijo Ollanta.

Ana Núñez.

A las 10 y 50 de la mañana, hora en la que el hoy presidente Ollanta Humala ingresaba al Congreso tras una breve caminata desde el Palacio de Torre Tagle, se pensaba que las anécdotas de la jornada serían que Alan García nunca llegó a entregar la banda presidencial y que Kenji Fujimori –hijo del encarcelado ex mandatario y hermano de la principal rival electoral del nacionalista– tuvo que darle la bienvenida al dignatario, al ser nombrado parte de la Comisión de Recibo.

Hasta entonces todo transcurrió con “normalidad”: Alejandro Toledo, en primera fila, conversó con algunos amigos –Yehude Simon, Kurt Burneo, Luis Iberico–luego de saludar muy brevemente a Carlos Bruce; los presidentes invitados, también en platea preferencial, conversaban animados a la espera del discurso de su nuevo homólogo; algunos congresistas electos del oficialismo gritaron esporádicas arengas.

Nada hacía presagiar entonces que la frase de juramento de Humala desataría la furia fujimorista, en especial la de Martha Chávez, por hacer mención a la Carta del 79.

Controversia constitucional

“Juro por la Patria que ejerceré fielmente el cargo de Presidente que me ha confiado la Nación para el período presidencial 2011-2016; que defenderé la soberanía nacional, el orden constitucional y la integridad física y moral de la República y sus instituciones democráticas, honrando el espíritu, principios y valores de la Constitución de 1979”, dijo Humala.

Silencio total en el Hemiciclo y luego de un larguísimo segundo, lluvia de gritos fujimoristas versus gritos oficialistas de “sí se pudo”.

El Himno Nacional trajo la calma... temporalmente. El recién juramentado mandatario inició su primer Mensaje a la Nación en medio de los estruendosos gritos de Chávez Cossío: “Esta es la Constitución que vale, usted es un usurpador, juramente primero por la Constitución del 93”.

De poco sirvieron los llamados al orden del notoriamente enfadado presidente del Congreso Daniel Abugattás, por lo que Humala tuvo que seguir con su discurso, mientras la fujimorista se desgañitaba en agravios. Los presidentes visitantes volteaban de tanto en tanto a mirar a la parlamentaria, tratando de entender qué pasaba.

“Recibo con humildad y profundo fervor patriótico este encargo y prometo que sentaremos las bases para borrar de la historia de nuestro país el lacerante rostro de la exclusión y la pobreza”, afirmó el líder nacionalista. Eran poco más de las once de la mañana.

“Usted es un usurpador, es un golpista”, insistía en increpar Chávez desde su escaño y con la Constitución de 1993 en la mano. “¡Ollanta dignidad!, ¡Ollanta dignidad!”, respondía el oficialismo.

El presidente número 17 de nuestra historia republicana reivindicó durante su discurso el pensamiento de José Carlos Mariátegui y de Víctor Raúl Haya de la Torre, hecho que fue retribuido con palmas apristas. Afirmó que la realidad de nuestro país exige transformaciones y el establecimiento de un nuevo contrato social.

“El gran Nelson Mandela, en un discurso pronunciado en el marco de la UNESCO, afirmó que la igualdad, la equidad económica y la justicia social eran la base de toda democracia. Él dijo: No hay democracia con miseria, no hay democracia con asimetrías sociales. Y porque creo en la justicia de esta frase, yo he jurado respetar y defender la democracia”, aseguró.

El flamante jefe del Estado aseguró que las características de su gobierno se podrían resumir en términos como reforma, democracia, libertades, inclusión, redistribución, crecimiento, paz con justicia, seguridad, descentralización, transparencia, soberanía y concertación.

“Quiero que vean en mí a un verdadero soldado de la República, a un celoso guardián del Estado de Derecho y a un defensor de los derechos humanos y de la libertad de prensa y de expresión”, agregó.

Durante su discurso, Humala también respondió a quienes afirmaron que un gobierno de Gana Perú sería similar al que encabeza Hugo Chávez en Venezuela.

“Nuestra voluntad no es la de copiar modelos; queremos, como Basadre, que el Perú deje de ser el espacio problemático que era y sigue siendo; queremos para ello construir un camino propio, un modelo peruano de crecimiento con estabilidad, democracia e inclusión social. Tomaremos como ejemplo lo bueno de otras experiencias, pero como decía Mariátegui, no habrá calco ni copia, sino creación heroica”, enfatizó.

Conflicto inminente

Luego de estos gestos políticos vendrían las referencias a sus promesas y compromisos plasmados en documentos como la Hoja de Ruta. El presidente de la República indicó que su gestión consolidará un crecimiento sano de la economía y sus estándares macroeconómicos, respetará las reglas fiscales para afrontar eventuales crisis externas o desastres naturales, y honrará los acuerdos comerciales con países y bloques amigos.

“Todo cambio para que sea sostenible, tiene que ser gradual y racional”, explicó, y habló de la necesidad de que el Estado tenga un rol promotor no solo del crecimiento sino del desarrollo del país. En ese contexto, anticipó su deseo de crear una línea aérea de bandera.

Quizá el anuncio más concreto fue el aumento del salario mínimo: en agosto se incrementará en 75 soles y en el 2012 habrá un segundo aumento por la misma suma.

“No vengo en son de guerra, sino de paz, sin venganza y sin rencor. A quienes persisten en el encono, les pido que bajen sus espadas”, concluyó. Pero el mensaje de una Martha Chávez sentada de espaldas a él le daba un mensaje claro: los fujimoristas tienen las banderas de guerra alzadas.

PROVOCAME

.

El congresista Javier Diez Canseco salió a aclarar que la juramentación de los vicepresidentes y la del presidente, Ollanta Humala, no tuvo ninguna carga de provocación.

“Yo no creo que empañe la juramentacion que el presidente aluda a la constitucion que fue un colectivo muy plural”, dijo Diez Canseco en una entrevista a una televisión local.

Muy por el contrario, el congresista del partido de Gana Perú declaró sobre la bochornosa actitud de la parlamentaria fujimorista Martha Chávez, quien estuvo vociferando, constitución en mano, que se debería juramentar por la vigente y no por una ya derogada.

“La señora Chávez tiene que responder, y el partido tiene que decir si respalda o no”, sentenció.

Asimismo, Diez Canseco dijo que “sería calamitoso de que el Congreso no tenga ningún pronunciamiento sobre lo ocurrido ayer”.

REPOTENCIAR

Ollanta repotenciara las empresas del Estado .

.

Discurso. Enapu, Electroperú, petroperú, sima y una aerolínea de bandera. Ollanta Humala apostó por la presencia estratégica del Estado en puertos, aeropuertos y energía, para priorizar las necesidades internas de todos los peruanos.

En su primer discurso como presidente, Ollanta Humala dejó bien claro que las empresas estatales de sectores estratégicos como puertos, aeropuertos y energía serán sus apuestas a través del fortalecimiento y modernización de la Empresa Nacional de Puertos (Enapu), los Servicios Industriales de la Marina (Sima), Electroperú y el establecimiento de una línea aérea de bandera.

Ello coincidió con sus propuestas electorales, dirigidas a salvaguardar la demanda interna de los peruanos.

“Promoveremos la construcción de hidroeléctricas, fortaleciendo Electroperú y las empresas eléctricas estatales regionales y promoviendo las privadas, en un adecuado balance que otorgue prioridad a la demanda nacional. El Estado evaluará la participación de Electroperú en nuevos acuerdos de inversión”, anotó el mandatario.

Y añadió para el sector portuario nacional: “Fortaleceremos el Sima y Enapu como empresas eficientes y solventes, (pues) reconstruiremos la marina mercante del Perú”.

Asimismo, manifestó que tomará “las medidas necesarias para que el Perú tenga su línea aérea de bandera y que el mercado aéreo comercial sea más abierto y de mayor competencia para abaratar y ampliar la comunicación al interior del país”.

A ello se le sumaría la empresa estatal Petroperú, ya que, aunque no fue mencionada en el discurso presidencial, el nuevo presidente del directorio de la empresa, Humberto Campodónico, confirmó su fortalecimiento para el beneficio de todos los peruanos.

“No es una vuelta al estatismo”

El economista Juan Narváez, miembro del grupo Propuesta Ciudadana, sostuvo que el fortalecimiento de las empresas estatales “está dentro de lo racional” y que “no es una vuelta a un estatismo exacerbado”, sino más bien se ubica en la línea de empresas públicas exitosas en Latinoamérica como la cuprífera Codelco en Chile y la empresa energética Petrobrás en Brasil.

“Estos ejemplos demuestran que no todas las empresas públicas son malas. Yo creo que sí es posible de alguna forma tener un mayor manejo estratégico del Estado. Pero hay que ver la eficiencia con la que estas van a operar y cómo se insertan dentro de una política de estímulo de la inversión privada”, detalló.

Asimismo, Narváez manifestó que con esta iniciativa se quiere retomar un cierto nivel de protagonismo del Estado en el desarrollo de la infraestructura y las comunicaciones, contrario a la política de concesiones de Alan García.

el cambio compartido

.Por Juan De la Puente

Tanto el Mensaje a la Nación como su primer gabinete expresan la apuesta de Ollanta Humala por construir una nueva mayoría gobernante en un espacio de encuentro entre los idearios socialdemócrata y liberal. El mensaje tuvo el propósito de promover un equilibrio fino entre los valores económicos que deben ser conservados y los nuevos valores formulados, especialmente los de carácter social y cultural.

Quizás por ello, Humala ha ahorrado palabras, no se ha comprometido con cifras gruesas y con el detalle, ha ratificado algunas ofertas puntuales pero se ha guardado el resto en el bolsillo, especialmente su política frente a los conflictos sociales y a las grandes empresas cuyo ideario fue hegemónico durante la década pasada.

No obstante, el mensaje contiene apreciaciones que no deben pasarse por alto. La primera es la mención de un modelo económico nuevo denominado “crecimiento con inclusión social”, con cargo a ser desarrollado, pero que se aleja del paradigma del crecimiento a secas. De aquí para adelante, la principal demanda de política pública será darle contenido y actores de esa inclusión, como la autoridad social y el papel del MEF, el rol de las regiones, los límites en la cobertura de los nuevos programas y su relación con la demanda de universalización de los derechos.

La segunda es el llamado a un nuevo contrato social que, al no pasar por un cambio constitucional profundo, debería transitar una vía inesperada: un conjunto de leyes dolorosamente alumbradas en el Parlamento. Por esa razón, luego del Mensaje, los escenarios principales del proceso político serán el Congreso y la calle.

En ese sentido, ni el mensaje ni la composición del gabinete han desmovilizado a los opositores al cambio o a los movimientos sociales. Ellos saben que quien pestañea pierde. La polarización de la segunda vuelta adopta una nueva forma, con los promotores del cambio y los opositores a él con un pie en el gobierno y el otro en la calle, una cohabitación muy original. Si las cosas no resultan, ¿quién sacará a quién del gobierno o, al revés, quién se quedará con la calle?

La tercera constante es la voluntad explícita para fortalecer el Estado, a través de las empresas públicas, la creación de una línea aérea de bandera y la mejora de la regulación ambiental. La idea de más Estado es coherente con el mensaje tácito de que, sin retornar al viejo estatismo, tendremos a un Estado que regula y participa en el mercado.

La apuesta de Humala es ambiciosa; más allá de la pluralidad, le propone al país, al mercado y a los ciudadanos, un cambio compartido. En pocos meses se sabrá si ese modelo de cambio es viable.

miércoles, 27 de julio de 2011

LA DESIGUALDAD SE MANTIENE

mantiene la desigualdad


Balance. Pese a que la pobreza oficial (al 2010) bajó a 31,3%. Farid Matuk, ex jefe del INEI, manifiesta que las cifras de reducción de la pobreza fueron infladas, ya que la real sería de 38%.

Magda Quispe.

Uno de los caballitos de batalla del gobierno aprista saliente fue la lucha contra la pobreza, que si bien, de manera oficial, se redujo entre el periodo del 2006 y 2010 de 44,5% a 31,3%, respectivamente, la brecha de desigualdad es lo que se mantiene intacta durante estos cinco años.

Mientras el hasta hoy presidente Alan García afirma que su mandato se caracterizó por estar dirigido hacia los más pobres y necesitados, expertos consultados por La República sostienen lo contrario.

Alta pobreza rural

Federico Arnillas, presidente de la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza (MCLCP), explicó que si bien hay un avance en la reducción de la pobreza monetaria –cuando el gasto de las personas no cubre el costo de la canasta básica– que al 2010 está en 31,3%, la gran meta incumplida es lo referente a la pobreza rural, en donde se concentra la población con mayor nivel de exclusión.

“Como consta en el Marco Macro Económico Multianual (MMM), el gobierno se propuso disminuir las diferencias urbano-rurales, bajar la tasa de pobreza monetaria rural de 75% a 45% y la pobreza monetaria urbana reducirla a 20% al 2011”, recordó.

Pero al hacer una evaluación, al término de la gestión y de acuerdo a la información disponible, la pobreza rural está en 54% a diciembre del 2010, mientras que la pobreza monetaria urbana llegó a 21,1%.

Para el experto este retraso en el logro de la meta de reducción de la pobreza rural en el país es una de las señales más claras de los problemas estructurales existentes, ya que es en estos lugares donde más se concentra la población con el mayor nivel de exclusión.

En el segundo quinquenio aprista, la desigualdad rural permaneció estancada en 0,41%.
Cifras infladas

Para Farid Matuk, ex jefe del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el avance que se demuestra con la reducción de la pobreza responde básicamente a la continuación del programa Juntos y al resultado inercial del crecimiento económico que está por encima del 3,3% del Producto Bruto Interno (PBI) per cápita.

“La reducción de la pobreza no se ha concentrado en las áreas de mayor intensidad, y por ello los niveles de desigualdad persisten. El gobierno no focalizó la reducción en las áreas de mayor pobreza como Apurímac, Huancavelica y Ayacucho, que siguen siendo al día de hoy los departamentos con mayor pobreza”, acotó.

Asimismo, resaltó que la cifra real de la pobreza sería de 38%. Explicó que con el cambio de metodología para medir el PBI en el 2006 se alteraron los indicadores de esta cifra.

“La cifra de la pobreza era de 48% al 28 de julio del 2006, pero en mayo del 2007 fue adulterada a 44%. La metodología aplicada genera una adulteración adicional de 4 puntos”, manifestó Matuk.

En ese sentido, Gustavo Yamada, profesor de la Universidad del Pacífico, señaló que queda pendiente una política de inclusión social en la que se tendrá que apuntalar si es que se quiere reducir la pobreza en el país.

Agregó que esta tarea es a largo plazo, que no se resuelve solo con Juntos, sino con servicios básicos de buena calidad como educación, salud, nutrición, entre otros.

Reacciones

"La gestión no ha sido buena, pues se concentraron más en crecimientos del 10% del PBI que en reducir la pobreza en zonas con mayor incidencia”. "FArid Matuk, ex jefe del inei.

"En la lucha contra la pobreza se debe quitar la visión de los programas sociales porque lo que se requiere son políticas sociales y económicas integrales”. Federico Arnillas presidente de la mesa de la MCLCP

MARTA VOLVIO A INSULTAR AL PERU

Martha Chávez insultó a accesitaria


Otra vez. Fujimorista protagonizó acto bochornoso. El hecho ocurrió en la juramentación de los nuevos parlamentarios andinos. Congresistas condenaron actitud.

Martín Hidalgo Bustamante.

El fujimorismo no tuvo mejor idea que iniciar la instalación del Período Anual de Sesiones 2011-2012 del Congreso insultando a la segunda suplente del parlamentario andino Javier Reátegui, Nora Bonifaz Carmona, quien juró al cargo recordando al fallecido ex alcalde de Lima Alberto Andrade.

“Anda pasea a tu burro”, fue la frase que lanzó desde su tribuna la parlamentaria fujimorista, acompañada en coro por su compañera de bancada Luisa Cuculiza.

El acto ocasionó el inmediato reclamo de las demás bancadas presentes en el Pleno del Congreso, ante la atenta mirada de los parlamentarios andinos de otros países invitados para la juramentación de los representantes peruanos.

Tras la juramentación, Nora Bonifaz exigió unas disculpas públicas por faltar el respeto no solo a ella sino a la imagen del Congreso.

“Me llama la atención que, estando en un nuevo Congreso, donde se espera tolerancia, se esté lanzando improperios. Lo tomo de la persona que viene”, agregó.

En tanto, la fujimorista intentó justificar su accionar al asegurar que “Nora Bonifaz es una congresista accesitaria y hay que recordarle a la gente lo que es”.

Martha Chávez recibió críticas hasta del propio fujimorismo, como Giancarlo Vacchelli, quien calificó el hecho de un “exceso”.
Vale recordar que durante los últimos meses del fujimorismo, Bonifaz protestó frente a la casa de Luisa María Cuculiza con un burro.

MUERE EXTRAÑAMENTE TESTIGO DE ACCOMARCA

Testigo del caso Accomarca muere en accidente de tránsito


A pocas semanas de que declare en el juicio por la matanza de Accomarca, el testigo Cesario Gamboa de la Cruz murió en un accidente de tránsito el último lunes 25 de julio, junto a otros dos comuneros de la localidad ayacuchana de Accomarca.

Así lo informó Karim Ninaquispe, abogada de los deudos de Accomarca y representante de la Asociación para el Desarrollo Humano Runamasinchiqpaq (ADEHR). Ninaquispe precisó que Gamboa era uno de los testigos claves de la matanza de 69 campesinos, el 14 de agosto de 1985.

“Cesario Gamboa era una persona luchadora que a pesar de su edad ha sido firme y constante en la búsqueda de justicia. Es lamentable que no haya podido declarar en el juicio y contar los horrores que le tocó vivir. Él vio morir a sus hijos y a sus paisanos en su propia casa”, recordó Ninaquispe Gil.

La casa de Cesario Gamboa fue utilizada por los militares para encerrar a los comuneros de Accomarca y luego ametrallarlos y prenderles fuego. “Exigimos celeridad en el juicio. Han pasado 26 años, muchos de los testigos son ancianos. Ellos quieren declarar, contar lo que pasó y a la vez ver que la justicia sentencie a todos los responsables de la masacre”, declaró Celestino Baldeón, presidente de la Asociación de víctimas de Accomarca.

RETOS

Retos: inclusión y reducir la pobreza


Visión. Nuevo gobierno lo prometió en la campaña, hoy le toca cumplir sus ofrecimientos. Expertos opinan que el desafío es grande ya que se debe lograr que el crecimiento siga siendo sostenido y que a su vez beneficie a todos.

Vanessa Ochoa.

Hoy un nuevo gobierno toma la posta y tiene sobre sus hombros la importante responsabilidad de llevar a cabo un verdadero cambio en el país, que es lo que muchos peruanos esperan. Fue precisamente esa la propuesta que llevó al líder de Gana Perú, Ollanta Humala, al poder.

Así, según economistas consultados por La República, la inclusión social con crecimiento sostenido, la erradicación de la pobreza y cambios acertados en el esquema tributario, respetando los contratos, a fin de conseguir recursos necesarios para cumplir las promesas electorales son los principales retos del gobierno de Gana Perú.

Para el economista Armando Mendoza, el crecimiento en los últimos años fue considerable, pero en términos absolutos no permitió que amplios sectores de la población se beneficien de esa bonanza.

“Lo que se necesita es crecimiento sostenido y con inclusión. Esto se logra con un segundo punto elemental, otro reto, la reforma tributaria y expandir los recursos del Estado. Esa será la única manera de garantizar la ejecución de los programas sociales que se han ofrecido. Prometer es bueno pero hay que ver de dónde se consigue “el cuero para hacer las correas”, aseveró.

Inclusión e integración

En esa línea, consideró que otro reto es la universalización de la salud, la cual no funciona por falta de dinero. “Espero que mañana (hoy) el mensaje de gobierno sea un compromiso con sectores claves como la agricultura o las microempresas”, acotó.

Con Mendoza coincidió el experto de la Universidad Católica José Oscátegui, para quien Ollanta Humala tiene como principal misión cumplir con la eliminación de la pobreza y lograr la integración del país. “La inclusión social comprende que en los lugares más alejaos del país llegue internet, haya penetración de la telefonía. No solo tiene que ver con programas sociales”, opinó.

En el aspecto de los cambios que deben hacerse para contar con mayores recursos en el Estado, Oscátegui recordó que el nuevo mandatario señaló que se respetarán los contratos con las empresas y todo cambio se hará bajo este marco.

Sin embargo, consideró que sería mucho mejor si el empresariado está dispuesto a dialogar. “Siempre dicen que se la juegan por el país, pero si están dispuestos a hacerlo, deberían dar una muestra de ese espíritu”, aseveró el economista, quien también descartó que en el mensaje de hoy se anuncien medidas de corte tributario, pues ello requiere mayor estudio, aunque aseguró que Humala dejará claro cuál es la dirección del gobierno.

El impacto internacional

Desde una óptica macroeconómica, el profesor de ESAN Jorge Guillén consideró que uno de sus retos es crear una línea de acción o plan de contingencia si Estados Unidos se declara en default o la crisis se agudiza.

“Otro reto es el de controlar la inflación ante el aumento en los precios de los alimentos producto de una mayor demanda externa. Ese es un riesgo. Estas políticas deben implementarlas lo antes posible en coordinación con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y el Banco Central de Reserva (BCR)”, comentó el experto.

Hay que cambiar el modelo de crecimiento

En una entrevista dada al diario La República, el economista Waldo Mendoza señaló que para revertir la desigualdad que existe en el país se tienen dos vías. Una es intentar cambiar el modelo de crecimiento económico, que es más complicado. “¿Cómo haces que la agricultura de Vilcashuamán sea más atractiva que la minería de Yanacocha? Eso es imposible, tendrías que imponer grandes dosis de intervención para que esa relación de rentabilidad se revierta. Y eso no va a pasar”, afirma el experto.

Otra vía, sostuvo Waldo Mendoza, es que a la larga el modelo de desarrollo pueda corregirse paulatinamente migrando hacia cierto grado de mayor industrialización. Así, explicó que la industria es más intensiva en mano de obra, por lo que un estilo de crecimiento manufacturero, de exportaciones no tradicionales, puede ser un modelo de crecimiento más igualador, aunque es difícil que se dé de un año para otro.

“Hay que ir construyendo, ir pensando cómo aprovechar las oportunidades que da la minería para ir migrando hacia ese otro modelo de desarrollo”, consideró.

Mendoza incidió en que lo complicado es distribuir, por lo que se debe elevar la presión tributaria, cobrar más a los que más tienen y utilizar esos recursos donde deben utilizarse.

Análisis

Raúl rosales
Mg. Profesor de la Facultad de Negocios de la UPC

No es el cuánto si no como

Mucho se habla de que el nuevo gobierno no debe parar el crecimiento económico que se dio en los últimos años. Sin embargo, poco se habla del tema de fondo, como el actual modelo de desarrollo. El ex ministro Carranza expresó en el pasado CADE que el Perú no necesitaba más cocineros sino más ingenieros. Aun cuando el boom de la gastronomía refuerza el orgullo nacional, no debemos olvidar que ningún país pobre se volvió desarrollado vendiendo materias primas y/o productos agrícolas.

Si bien la agricultura genera puestos de trabajo y hace que una parte de la población salga de la pobreza, el desafío es hacer que el Perú tenga un nivel de vida como el de las principales economías del mundo y eso se logra desarrollando industrias con mayor valor agregado. Si el crecimiento de los próximos años seguirá basado en exportaciones de materias primas y productos agrícolas es probable que el combustible se nos acabe y no logremos ser un país desarrollado.

Ahora que inicia un nuevo gobierno, pongámonos a pensar que aún no hemos logrado nada. Lo más importante es ponernos a pensar cómo estamos creciendo y no sólo cuánto.

la mujer Y EL PODER

)
.Por Antonio Zapata

Un libro editado por Sara Beatriz Guardia trata sobre la participación femenina en la independencia latinoamericana. En sus páginas, aparece el colapso del antiguo régimen colonial que abrió puertas para la ruptura del tradicional encierro femenino en la unidad doméstica. En ese momento, las mujeres organizaron tertulias para fomentar la nueva vida política, tomaron la pluma y, en ocasiones, acompañaron la lucha, participando de la guerra. Toda época revolucionaria estimula a los sectores subalternos, que encuentran ventanas para desplegar sus ansias de poder y reconocimiento.

Además, la independencia fue una época singular, porque terminó con la división en dos sociedades separadas legalmente, una para indios y otra para blancos. Por primera vez en la historia, el país se organizaba con base en la igualdad jurídica. Algunas mujeres entendieron que ese discurso igualitario no se reducía a los varones, sino que también las incluía. Personajes como María Parado de Bellido o Manuelita Sáenz son imposibles en la era colonial y corresponden plenamente al cambio de época que fue la independencia.

Las mujeres latinoamericanas empezaron a ocuparse del poder, aunque, avanzado el siglo XIX, la sociedad patriarcal recuperó sus fueros. Así, la relación entre los géneros en la esfera política ha variado en forma ondular y por momentos las mujeres han estado muy cerca de las instancias de decisión, mientras que, a continuación, las fuerzas conservadoras volvían a encerrarlas a criar hijos.

Una fecha crucial de este proceso es 1956, cuando la mujer obtuvo el voto y se eligieron las primeras congresistas. Desde entonces, el número de congresistas ha variado, aunque en el Parlamento que se inicia se registra menor número de mujeres, incluso menos que en la década de 1990.

Con el primer gobierno de Alan García, las mujeres llegaron al gabinete y aparecieron las ministras. En este segundo mandato que está terminando, nuevamente García ha sabido trabajar con bastantes mujeres en la conducción de los ministerios. Ellas han sido buenas colaboradoras suyas, al punto que Rosario Fernández ha sido su última premier.

Así, la inclusión femenina en instancias de poder ha venido siendo parte de las costumbres políticas nacionales, poniéndonos a tono con la práctica internacional. En efecto, en países que se asumen como modernos y desarrollados, incluso nuestros vecinos latinoamericanos, es frecuente que las mujeres lleguen a ocupar la mitad de los ministerios o cuando menos una cuarta parte.

Ante esta realidad, sorprende que en el gabinete de inauguración del presidente Humala apenas aparezcan tres mujeres, una sexta parte del total. Sobre el Mimdes, además, se han producido anuncios confusos, que indican su desaparición en el plazo de un año, para dar paso a un nuevo ministerio que dejaría de llamarse de la “mujer” y se especializaría en programas sociales. Pareciera que la mujer vuelve a ser invisible en las altas esferas.

Sin embargo, la fortaleza principal de Ollanta Humala es una relación de pareja muy sólida con Nadine Heredia, quien comparte su pasión por la vida política. Cuando el gobernante considera el intelecto de su esposa, normalmente las mujeres avanzan hacia el manejo del poder.

En el Perú actual existen muchas profesionales de primer nivel que están calificadas para tomar decisiones y ejercer el mando. Es más, habitualmente se piensa que las mujeres son más honestas y, en consecuencia, más capacitadas para dirigir los negocios comunes de la sociedad. Por ello, la ciudadanía vería con buenos ojos una mayor apertura a mujeres de posiciones políticas significativas y no solo como subalternas, mostrando la capacidad del Estado para incluir al 50% del país. ¿Será para el siguiente gabinete?

la mujer Y EL PODER

)
.Por Antonio Zapata

Un libro editado por Sara Beatriz Guardia trata sobre la participación femenina en la independencia latinoamericana. En sus páginas, aparece el colapso del antiguo régimen colonial que abrió puertas para la ruptura del tradicional encierro femenino en la unidad doméstica. En ese momento, las mujeres organizaron tertulias para fomentar la nueva vida política, tomaron la pluma y, en ocasiones, acompañaron la lucha, participando de la guerra. Toda época revolucionaria estimula a los sectores subalternos, que encuentran ventanas para desplegar sus ansias de poder y reconocimiento.

Además, la independencia fue una época singular, porque terminó con la división en dos sociedades separadas legalmente, una para indios y otra para blancos. Por primera vez en la historia, el país se organizaba con base en la igualdad jurídica. Algunas mujeres entendieron que ese discurso igualitario no se reducía a los varones, sino que también las incluía. Personajes como María Parado de Bellido o Manuelita Sáenz son imposibles en la era colonial y corresponden plenamente al cambio de época que fue la independencia.

Las mujeres latinoamericanas empezaron a ocuparse del poder, aunque, avanzado el siglo XIX, la sociedad patriarcal recuperó sus fueros. Así, la relación entre los géneros en la esfera política ha variado en forma ondular y por momentos las mujeres han estado muy cerca de las instancias de decisión, mientras que, a continuación, las fuerzas conservadoras volvían a encerrarlas a criar hijos.

Una fecha crucial de este proceso es 1956, cuando la mujer obtuvo el voto y se eligieron las primeras congresistas. Desde entonces, el número de congresistas ha variado, aunque en el Parlamento que se inicia se registra menor número de mujeres, incluso menos que en la década de 1990.

Con el primer gobierno de Alan García, las mujeres llegaron al gabinete y aparecieron las ministras. En este segundo mandato que está terminando, nuevamente García ha sabido trabajar con bastantes mujeres en la conducción de los ministerios. Ellas han sido buenas colaboradoras suyas, al punto que Rosario Fernández ha sido su última premier.

Así, la inclusión femenina en instancias de poder ha venido siendo parte de las costumbres políticas nacionales, poniéndonos a tono con la práctica internacional. En efecto, en países que se asumen como modernos y desarrollados, incluso nuestros vecinos latinoamericanos, es frecuente que las mujeres lleguen a ocupar la mitad de los ministerios o cuando menos una cuarta parte.

Ante esta realidad, sorprende que en el gabinete de inauguración del presidente Humala apenas aparezcan tres mujeres, una sexta parte del total. Sobre el Mimdes, además, se han producido anuncios confusos, que indican su desaparición en el plazo de un año, para dar paso a un nuevo ministerio que dejaría de llamarse de la “mujer” y se especializaría en programas sociales. Pareciera que la mujer vuelve a ser invisible en las altas esferas.

Sin embargo, la fortaleza principal de Ollanta Humala es una relación de pareja muy sólida con Nadine Heredia, quien comparte su pasión por la vida política. Cuando el gobernante considera el intelecto de su esposa, normalmente las mujeres avanzan hacia el manejo del poder.

En el Perú actual existen muchas profesionales de primer nivel que están calificadas para tomar decisiones y ejercer el mando. Es más, habitualmente se piensa que las mujeres son más honestas y, en consecuencia, más capacitadas para dirigir los negocios comunes de la sociedad. Por ello, la ciudadanía vería con buenos ojos una mayor apertura a mujeres de posiciones políticas significativas y no solo como subalternas, mostrando la capacidad del Estado para incluir al 50% del país. ¿Será para el siguiente gabinete?

domingo, 24 de julio de 2011

DIOSES Y REINAS

.Por Eduardo Galeano (*)

Egipcias

Heródoto, venido de Grecia, comprobó que el cielo de Egipto no se parecía a ningún otro río ni a ningún otro cielo, y lo mismo ocurría con las costumbres.

Gente rara, los egipcios: amasaban el pan con los pies y el barro con las manos y momificaban sus gatos muertos y los guardaban en cámaras sagradas.

Pero lo que más llamaba la atención era el lugar que las mujeres ocupaban entre los hombres. Ellas, fueran nobles o plebeyas, se casaban libremente y sin renunciar a sus nombres ni a sus bienes.

La educación, la propiedad, el trabajo y la herencia eran derechos de ellas, y no solo de ellos, y eran ellas quienes hacían las compras en el mercado mientras ellos estaban tejiendo en casa.

Según Heródoto, que era bastante inventor, ellas orinaban de pie y ellos, de rodillas.

Hebreas

Según el Antiguo Testamento, las hijas de Eva seguían sufriendo el castigo divino.

Podían morir apedreadas las adúlteras, las hechiceras y las mujeres que no llegaran vírgenes al matrimonio; marchaban a la hoguera las que se prostituían siendo hijas de sacerdotes

y la ley divina mandaba cortar la mano de la mujer que agarrara a un hombre por los testes, aunque fuera en defensa propia o en defensa de su marido.

Durante cuarenta días quedaba impura la mujer que paría hijo varón. Ochenta días duraba su suciedad, si era niña.

Impura era la mujer con menstruación, por siete días y sus noches, y trasmitía su impureza a cualquiera que la tocara o tocara la silla donde se sentaba o el lecho donde dormía.

Romanas

Cicerón había explicado que las mujeres debían estar sometidas a guardianes masculinos debido a la debilidad e su intelecto.
Las romanas pasaban de manos de varón a varón. El padre que casaba a su hija podía cederla al marido en propiedad o entregársela en préstamo. De todos modos, lo que importaba era la dote, el patrimonio, la herencia: del placer se encargaban las esclavas.

Los médicos romanos creían, como Aristóteles, que las mujeres, todas, patricias, plebeyas o esclavas, tenían menos dientes y menos cerebro que los hombres y que en los días de menstruación empañaban los espejos con un velo rojizo.

Plinio el Viejo, la mayor autoridad científica del imperio, demostró que la mujer menstruante agriaba el vino nuevo, esterilizaba las cosechas, secaba las semillas y las frutas, mataba los injertos en las plantas y los enjambres de abejas, herrumbraba el bronce y volvía locos a los perros.

(*) Escritor uruguayo. Tomado de Espejos, una historia casi universal.