SONREIR CON LA HISTORIA

Hay algo en el celular de Jorge Buendía que lo deja intranquilo. Unos mensajes en una lengua misteriosa que aparecen insistentemente. Poco a poco se irá enterando de que son frases escritas en la antigua lengua muckik, que lo van guiando hasta Lambayeque, adonde se dirige junto con su padre y su enamorada, la seductora Linda Melinda (fetiche también de otros relatos del autor). Allí sabrán que la momia del Señor de Sipán ha sido secuestrada, y que es desde el más allá, donde los espíritus impelen a Jorge Buendía para que desentrañe esta desaparición. Este es el argumento que el galardonado escritor Luis Freire Sarria desarrolla con desenvoltura y agilidad, recreando datos históricos y recurriendo a la ancestral lengua muchik. Y en donde, aunque la trama descuide la profundidad de este viaje identificativo, se sobrepone la acentuación de la humorada, la descripción sarcástica y las situaciones discordantes, que sitúan al autor en la más característica tradición de nuestros escritores de sátira social y fabulación feliz.