Sólo seis años por ladrón, chuponeador y corruptor

Tras admitir sus graves delitos –corromper políticos, chantajear opositores que eran chuponeados y comprar medios de comunicación con dinero robado del erario nacional para sus turbios fines de perpetuarse en el poder– fue sentenciado ayer el ex dictador Alberto Fujimori a seis años de prisión y al pago de una reparación civil de más de 27 millones de soles.Pese a que el Fiscal Supremo José Peláez había solicitado para Fujimori ocho años de cárcel por los delitos de peculado doloso, corrupción de funcionarios, cohecho activo genérico y violación del secreto de las comunicaciones, la Sala Penal Especial, que preside el vocal supremo César San Martín, rebajó la pena a seis años de cárcel y a dos años de inhabilitación para ejercer cargo público, luego que Fujimori aceptó haber dirigido una red de corrupción desde el Palacio de Gobierno junto con su cómplice Vladimiro Montesinos y los ex jefes de las Fuerzas Armadas y policiales obsecuentes a su régimen.“Está acreditado que el procesado Fujimori, no sólo aceptó los delitos que formuló en su requisitoria el fiscal José Peláez, sino que aceptó el monto como pago de reparación civil. Está acreditado que hizo mal uso de los recursos del Estado para comprar la línea editorial de CCN Canal 10 y del diario Expreso para perpetuarse en el poder en complicidad de Vladimiro Montesinos”, leyó la relatora.Tal como declaró Montesinos en otros procesos por los cuales ya fue condenado por los mismos delitos, se conectó con el entonces dueño del diario Expreso Eduardo Calmell del Solar, para que éste le venda sus acciones y usó como testaferro a Vicente Silva Checa, por un monto de 10 millones de soles. “Se estableció que dicho dinero fue entregado del presupuesto de las Fuerzas Armadas”, dice la sentencia.Plan “Emilio”Fujimori cometió el delito de interceptación telefónica en complicidad con Montesinos para lo cual idearon el plan “Emilio”, que consistía en “chuponear” los teléfonos de los políticos y periodistas opositores al régimen, tras el autogolpe de 1992.Según testimonios de fujimoristas, el ex dictador ordenó que se instale diversos centros de escucha, uno de ellos operó desde el mismo Palacio de Gobierno llamado “Central Casa blanca” y otros en distintos puntos de la ciudad, todos dirigidos por su hombre de confianza Roberto Huamán Azcurra.Fujimori también ordenó a Montesinos llevar adelante el plan reclutamiento, para que a costa del dinero de todos los peruanos compre la conciencia de congresistas por un puñado de dólares a fin de que se pasen a las filas del fujimorismo y le den mayoría parlamentaria.Para ello contó con dinero de las reservas 1 y 2, en complicidad con los comandantes generales del Ejército, Nicolás Hermoza Ríos; la FAP, Elesbán Bello y Marina de Guerra, Antonio Ibárcena Amico.Entre los agraviados se encuentran: César Hildebrandt, Javier Pérez de Cuéllar, Jorge Mufarech Nemi, Javier Ortiz de Zevallos, Ricardo Vega Llona, Cecilia Valenzuela, Gustavo Mohme Seminario, Javier Diez Canseco, Fernando Rospigliosi, Enrique Zileri Gibson, Lourdes Flores Nano, Luz Áurea Sáenz, Javier Valle Riestra, Alberto Borea, entre otros. César Ascues Uribe Redacción