Para los directivos actuales de Andahuasi, el ex presidente del directorio de la empresa Eduardo Núñez encontró en Andahuasi la fuente de su riqueza. De ser un contratado para el campo, hoy es un gran acaudalado, y no por haber sido un gran empresario ni por haberse sacado la lotería. Tiene costosas propiedades pagados con dinero provenientes de la empresa, dándole forma legal a lo que moralmente linda con el robo, afirma Elver López gerente administrativo de la empresa.
Refiere que Eduardo Núñez nació en el valle del tambo en la zona de Chucarapi (Arequipa) y entró a la empresa Andahuasi en los primeros años de la década de los 80, cuando, con el aval de su padre, ingresa a administrar uno de los tres anexos en la zona de Quipico (Santa Inés). Ya en el cargo organizó una mafia entre los trabajadores en donde se le daba mal uso al combustible, gasolina y petróleo y diversos materiales de almacén; se quedó como administrador varios años pero lo despidieron dos veces, la primera en el año 1986 por irregularidades administrativas y la segunda en 1996, antes de que la empresa se convirtiera en Sociedad Anónima, por corrupción y malversación de fondos, añade López. Ante las denuncias, afirma, Núñez postula e ingresa al directorio, con el apoyo del sector Quipico (hoy tomado por el Grupo Wong).
Según el gerente administrativo de Andahuasi, Núñez Cámara tuvo sueldo de gerente general, cargo que no siempre ejerció, además de cobrar dietas por integrar el directorio, por montos insultantes para la mayoría de los trabajadores. También cobraba como presidente de la junta de regantes. Prácticamente ganaba en un día lo que un trabajador de campo obtiene por romperse el lomo durante un mes. Pero tales ingresos tampoco le alcanzaban para sus gastos familiares, para pagar sus deudas y para darse la vida de rey, añade.
El año 2006, abusando de su cargo, se hizo prestar de la empresa la cantidad de S/. 73,440.00, para su campaña electoral a la presidencia del gobierno regional de Lima, por el Partido Unidad Nacional, cuando Lourdes Flores Nano, una vez más intentaba ser candidata a la presidencia de la República. Núñez se hizo pagar además una maestría en la Universidad de Harvard que ascendió a los 200 mil soles conjuntamente con quienes hoy son sus más frecuentes escuderos, Elizabeth Bernal Vento, Edelmira Cobeñas Aquino, Adolfo Galindo Santiago, relata Wilder Ruiz, dirigente de los trabajadores de Andahuasi.
Los directivos de Andahuasi dicen tener documentos oficiales de la Superintendencia Nacional de Registro Públicos (Sunarp) que ponen al descubierto las innumerables propiedades que adquirió Núñez Cámara, a lo largo de los 12 años que duró su administración cuando se desempeñó como gerente y presidente del directorio de la Azucarera Andahuasi y aprovechó el cargo para beneficiarse y enriquecerse ilícitamente logrando adquirir ocho propiedades, terrenos e inmuebles en Lima, Huacho y Sayán, llegando así a amasar una asombrosa fortuna que llega a 1’120.000.00 dólares.
El más sorprendente es el caso de Andahuasi. Según Registros Públicos de Huacho, Eduardo Núnez y su esposa Olivia Santos Moreno, el 10 de febrero del 2006 hicieron el negocio de su vida comprando y vendiéndose a sí mismos una propiedad construida de 198.45 metros cuadrados que pertenecía a la Empresa Agraria Azucarera Andahuasi Sociedad Anónima, por la irrisoria suma de 4,000.00 soles (Lote N2 MZ “H” sector 1 Lotización Andahusi, distrito de Sayán). Es decir, que cada metro cuadrado fue comprado a sólo veinte soles, con buena ubicación, vista panorámica de la plaza de armas y frente a la iglesia San Nicolás de Tolentino, sostiene Ruiz.
Ya en el año 2,000 Núñez empezaba a conocer el negocio de la compra de propiedades, sobre todo las que estaban hipotecadas con en Banco Continental. Es así que el 12 de abril adquiere una parcela por 27,000.00 dólares, ubicada en la zona de Santo Domingo -sección sur- este en Humaya Baja, cuya amplitud es de 43 mil metros cuadrados, añade el dirigente.
Más propiedades por investigar
Según Ruiz en el año 2006 Eduardo Núñez y su esposa adquirieron un inmueble en la parcela 1, 2, 3 de la manzana “D” del fundo Chururo, en el distrito de Santa María, por el precio de 76,667.50 dólares con una amplitud de 2,566 metros cuadrados pagados a través del Banco Continental, que le abrió una línea de crédito de 100 mil dólares para este negocio.
Similar operación se ejecutó con la parcela 3, 4, 5 en el mismo distrito de Santa María en donde Núñez adquiere un lote por la suma de U.S. $50,462.70 dólares de 2,519.69 metros cuadrados, y nuevamente el Banco Continental le dio un préstamo de 100 mil dólares. Otro terreno fue adquirido en el sector desagravio por la suma de $ 45.000.00 mil dólares, añaden los dirigentes de Andahuasi.
Además se compró en Lima una casa de dos pisos con jardín, living, patio, terraza, jardín, balcón y todas las comodidades por la suma de 118, 000.00 dólares en la zona residencial de La Molina, prosigue el gerente López.
En Andahuasi se preguntan cómo Eduardo Núñez pudo amasar tan grande fortuna y consideran que evidentemente lo hizo aprovechando del cargo que tenía como presidente del directorio de la Azucarera Andahuasi o el de presidente de la Junta Nacional de Usuarios, para aprovecharse de los terrenos hipotecados. La información que se empieza revelar a través del equipo especial de auditoría e inteligencia, contratado por los propios accionistas de Andahuasi muestra que Eduardo Núñez recibía mensualmente U.S.$ 5,000.00 dólares americanos, lo que está por revelarse en sólo unos días es que si cumplía con sus declaraciones de toda su fortuna a la Sunat, anota López.
Francisco Quispe
Colaborador
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