Ellas por el cambio

Para las mujeres peruanas la única manera de impedir que nuestros recursos naturales sigan siendo entregados a las transnacionales en detrimento de las poblaciones donde se ubican, es con el cambio de la actual Constitución fujimorista tal y como lo prometió el presidente García cuando fue candidato.En el reciente encuentro nacional de mujeres “Todas somos Micaela” más de un centenar de representantes de agrupaciones sociales, políticas y barriales, precisaron que el saqueo y la contaminación que sufren las comunidades amazónicas y andinas, por empresas mineras, petroleras y madereras, tiene como soporte la carta política de 1993 que en el capítulo sobre recursos naturales precisa que los pobladores son dueños de sus tierras, pero no de su subsuelo.“Se trata de un absurdo que no debe continuar. Es como si yo estuviera embarazada y a la hora del parto se llevaran a mi hijo con el argumento que no me pertenece”, precisó Noemí Benito.De igual forma las mujeres exigieron al gobierno y al Poder Judicial que cese la persecución contra los líderes amazónicos, particularmente contra las mujeres “cuyo único delito es defender sus tierras frente a la voracidad de grandes empresas”, enfatizó Susan Portocarrero.Agresiones y contaminaciónMaría Isabel Cedano, directora del Estudio para la Defensa y Derechos de la mujer (Demus), exigió a los poderes del Estado sanciones más drásticas contra los autores de agresiones sexuales, pues “no podemos permanecer indiferentes ante las ataques que sufren las mujeres y las niñas, sobre todo en el interior, por ejemplo, en el Cusco un 70 por ciento de mujeres menores de 15 años son víctimas de maltratos sexuales”.La parlamentaria andina Elsa Malpartida, una de las expositoras, recibió aplausos, pronunciamientos y diversas muestras de solidaridad de las asistentes frente a la campaña de ataques en su contra. La bióloga Ana María Cabezas, representante del Comité Malpica hizo hincapié en la falta de una política adecuada para preservar el medio ambiente, ante tantas agresiones a sus tierras la gente migra a la ciudad y el campo va quedando desierto. El recurso agua no se cuida.Denis MerinoRedacción